Llueve...

EHUR OHR


AVISO DE AUSENCIA DE EHUR OHR
Fin


Llueve afuera…

se desata,

algo suena pertinaz y torrentoso,

un diluvio de repente incontenible…

impertinente.

Lluvia terca abandonada…

se desquita de la ausencia.

Solo llueve…

arrollante…

algo necia…

sin alivio,

no se deja consolar con mi silencio,

se libera…

arbitraria en las acequias,

se derrama en las luceras,

se apodera de ventanas.

Ritmo lento que aligera su cascada,

gota a gota se acelera…

y se escapa.

Noche fría acompañante,

temporal empapado que se calma,

un silencio que adormece…

se despeja…

ahora escampa…

Se serenan mis pasiones…

se acostumbran.

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Comentarios +

Comentarios3

  • ..........................

    Ah, hermoso tu poema!!!- Para leerlo y volverlo a leer. Un abrazo, poeta.

    "Noche fría acompañante,

    temporal empapado que se calma,

    un silencio que adormece…

    se despeja…

    ahora escampa…

    Se serenan mis pasiones…

    se acostumbran."

    • EHUR OHR

      LLueve querida Lucia...afuera...y también adentro. Feliz noche .

    • Rosa🌹Roja...

      La lluvia se acompasa con el rugir de dentro...de la lluvia interior que nos inunda de rios que trascurren vertiginosos...llueve más por dentro que en esa calle que a trevés de la ventana...miramos...y cuando escampa...queda solo el húmedo recuerdo de las calles mojadas y de un corazón roto...
      Precioso tu poema compañero...como todo lo que escribes...felicidades Eudoro...🌹

      • EHUR OHR

        Amiga querida llegaste con la lluvia. Siempre es un gusto leer tus comentarios, y se te extraña. Feliz noche, espero pronto poder charlar contigo.

      • Anabell López Rodríguez

        Tus letras caen como gotas de lluvia en mi corazón, adoro la lluvia, y casi siempre cuando llueve afuera, también lo hace adentro y truena ferozmente. Siempre es un placer visitar tu poesía. Un abrazo amigo.

        • EHUR OHR

          Los días de tormenta te encierran en una magia espiritual. Te dejan a veces flotando en esos momentos añorados. La lluvia comienza violenta, incontrolable, se pone ruidosa, pero luego con las horas se va escurriendo por las cunetas, hasta que sólo se hace gotas de diamante en los cristales de las ventanas. Una escena que pocos la sabemos disfrutar. Siempre es gratificante verte por mis versos querida Anhell.



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