Enorgullécete de tu fracaso,
que sugiere lo limpio de la empresa:
luz que medra en la noche, más espesa
hace la sombra, y más durable acaso.
No quiso Dios que dieras ese paso,
y ya del solo intento bien le pesa;
que tropezaras y cayeras, ésa
es justicia de Dios: no le hagas caso.
¿Por lo que triunfo y lo que logro, ciego,
me nombras y me amas?: yo me niego,
y en ese espejo no me reconozco.
Yo soy el acto de quebrar la esencia:
yo soy el que no soy. Yo no conozco
más modo de virtud que la impotencia.
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Autor:
Zagreo (
Offline) - Publicado: 30 de mayo de 2009 a las 08:11
- Comentario del autor sobre el poema: Sermón de ser y no ser, Agustín García Calvo.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 92
- Usuarios favoritos de este poema: mariapdfoxa
Offline)
Comentarios7
Profundas palabras que llegan al interior...
Es el primer poema que te leo, y un soneto, nada menos. La rima de los tercetos es curiosa. Tiene algunos endecasílabos sáficos. Parece, según señalas, que la autoría es de Agustín García Calvo. El mensaje me ha parecido muy humano. Los últimos versos llegan.
Saludos, Zagreo.
No es facil hacer un soneto manteniendo excelente semantica, tiene aires a De quevedo. Excelente, muy bueno
Muy buen soneto.
Muy buen soneto... nada mas tengo para decir...
Até logo
Excelente!...felicitaciones por el soneto, poema inagural; espero disfrutar de mucho más. Cálidos saludos
Fuerte, decisivo, rompedor de estructuras..deja pensando. Me agrada eso. Recibe mi saludo.
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