No es necesario mover un dedo
para dejarlos en evidencia,
ni tan siquiera precisarás
pedirles que hablen con tu abogado
cuando traten de reclamarte
una explicación por sustentar
tus sueños con unos tirantes
estampados de flores.
En el transcurso del invierno,
justificándose con la pelusa
de su ombligo,
bien pueden pasar por sucedáneos
de abejas de peluche,
pero a la llegada de la primavera
huirán de los gladiolos
como alma que lleva el diablo.
Moléstate en regalarles
un ramo de rosas
y se verán delatados por el sonrojo
de sus ojos y su pimiento nasal,
aunque quieran hacerte creer
que la emoción les supera
sonándose en un pañuelo
de usar y tirar.
Sorpréndelos pisoteando
margaritas y alegarán
motivos de salud,
pero aquí el único móvil
del crimen es el odio:
su combustible, su motor
y su superficie de agarre.
- Autor: Joseponce1978 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de agosto de 2021 a las 00:07
- Comentario del autor sobre el poema: Como me ha ocurrido ya otras veces, mientras escribía esto se me ha ocurrido otra historia. En este caso se trata de un cuento titulado: "La abejita alérgica al polen". No sé si al final lo escribiré, para mí es muy sencillo imaginar historias pero me supone un gran esfuerzo plasmarlas en palabras. Mis condiciones imaginativas siempre van muy por delante de mi capacidad para darles forma. Lo de escudriñar en mi sesera para encontrar la palabra o la frase precisa, entre las infinitas opciones disponibles, con el objeto de hacerme comprender, me deja agotado y con las sienes palpitantes. En fin, a ver si algún día me pongo a ello y lo consigo.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 36
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