Corren pesados por un camino estrecho de juventud
los muslos cansados de errar los pasos.
El corazón sigue la marcha del calendario, sin razón
con ansiado tesón, de alcanzar la tranquilidad del sueño.
Volátiles empeños, anhelos que gobiernan revolotean
en mis entrañas, mientras deambula de norte a sur
un áspero viento que aroma de impotencia y odio
todo lo que corrompe la endeble marcha de la humanidad
inútil caridad, infructuosa libertad, vana conciencia
displicente descanso para ser nada en y con el tiempo.
Yo en abismal tormento me revuelco,
no soy más que un ser contaminado del devenir enfermo
en un caudal arremolinado y ríos revueltos
navega en los cauces siniestros mi pensamiento
en aquellos rincones donde no cabe más que el infierno
y todos mis secretos que me van devorando hambrientos
de la tibia esperanza, de la ruptura perene con el mundo,
para encontrar la paz, esa que busco y no hallo
ya ni en las pupilas del ser que amo, vocifero el dolor,
ahogando sensaciones, voy simplemente resquebrajada
loba solitaria que deambula y va atemporalmente muriendo.
- Autor: Isel (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de septiembre de 2021 a las 00:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
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