La primavera pasa de prisa y solo deja su aroma entre las praderas y los jardines del Edén.
Llega el verano con sus olas termales y la sombrilla coquetea con el murmullo.
Con chispas dulces y transparentes saluda al otoño.
Con fuertes murmullos entre las nubes y el infinito se aparece el otoño, a pasos lentos camina para encontrar al invierno.
Se aproxima el invierno, no le respeta que este en otoño, se expande entre montañas y avenidas, lo mismo le da estar entre el verano y la primavera.
El invierno es como los regalos, nunca sabes que guarda en su trayectoria.
y si conoces el debenir del tiempo estarás listo para interactuar con su ir y venir.
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