La memoria de las piedras,
los muros derruidos.
La memoria del retrato pintado al óleo,
recuerdo de vanidades.
La marea que borra las pisadas en la arena,
la luz que terminará en oscuridad,
las tinieblas que atraviesas en busca de una deslumbrante luz.
La memoria del fuego que quemó tus libros,
que incendió las bibliotecas,
que arrasó ciudades enteras.
La memoria del cuerpo que no cuidaste,
del amor que no luchaste,
del amigo que no cuidaste,
de las injusticias que no renunciaste.
La memoria del silencio,
cómplice de tu cobardía, de tu abandono,
de los restos de nicotina, de alcohol,
de la lluvia que nos cubría,
mientras paseábamos hacia el hotel.
La melancolía de los días pasados,
El desasosiego de los años que vendrán.
Y así, pasa la vida.
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Autor:
bailandosolo (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de octubre de 2021 a las 07:17
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 20
Offline)
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