Era el asedio. Ese punto
de equidistancia, medido
por el mundo. Un ascenso
metódico de azufre y gasolina.
La línea que separa el cielo,
las ruinas después de los escombros.
El abandono. Un cuerpo
acariciado y mutilado por idéntica
acción. Un amor en sospecha.
Le pusiste nombre a las cosas.
Y fue tu alma la que se traicionó.
Pues no había, en nada de todo
aquello, verosimilitud o verdad.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 9 de noviembre de 2021 a las 02:03
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 53
- Usuarios favoritos de este poema: 🖤🍃Meigajaz ☯💞, Jorge Horacio Richino, Lale Neda, Mariela Briceño Fuentes🦄, Aitor Duarte Fernández 🏔️❄️⛏️, Alexandra L, Antonio Miguel Reyes, María C., David Arthur
Comentarios3
Se equivoco de pleno
al ponerle nombre a las cosas,
hubiera tenido que meditar antes,
un pcoo a solas..luego decir, hacer, actuar.
Un abrazo
Gracias María, es una verdadera joya tu respuesta, un abrazo!!
Merci a ti ten buen día.
Doble te lo envío el abrazo
Merci amiga. Un 😘
........Le pusiste nombre a las cosas.
Y fue tu alma la que se traicionó.
Pues no había, en nada de todo
aquello, verosimilitud o verdad.......
tristeza por equivacación
Un abrazo Ben
David
Y tanto! Suele ocurrirnos, pienso, un abrazo David!! Y gracias-.
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