TESTIMONIO
“La gran misericordia del Señor que nunca nos deja solos”
A: Mi Musa y maestra
Amparito Mérida
Este día se hubiesen cumplido
30 de noviembre
63 años de Matrimonio
.
.
Por sesentitres años fuiste de amor testigo
tu pupila bendita, fulgor de la mañana
tu misterioso amor abre nueva ventana
con mi alma enamorada rezando a Dios bendigo.
.
Nos lega cruz bendita, con mi pedir lo hostigo
envejecer, morir, pensarlo sangre emana
Jesús dispuso, el éxodo, coexistencia humana
su voluntad cumplí solo Dios es testigo
.
Todos fuimos cercados y de amor rodeados
que la muerte es misterio, no supe que sintió
se le brindo consuelo sacrosantos cuidados
.
Quizá ella preguntaba ¿Por qué no lloré yo?
enjugue el llanto, y vi …. ¡Sus párpados cerrados!
Yo le bese la frente, “Sin lamento, expiró”
.
.
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
Guatemala C.A.
30 noviembre 2021
Análisis
“TESTIMONIO” versos alejandrinos Los versos alejandrinos son de origen francés, El termino viene del poema francés del siglo XII de Lambert Le Tors, Alexandre de Barney y de Gautier de Chátillon. Son versos de arte mayor cuentan con 14 sílabas cada una divididos en dos partes iguales de 7 sílabas cada una basada en la respiración y la métrica que conforman un solo verso. Los poemas recogidos en el Mester de Clerecía trataban sobre temas religiosos. Su novedad residía en la incorporación de nuevas métricas, estaban escritos en lengua romance y presentaban una renovación del lenguaje nunca vista anteriormente. Podemos encontrar una recuperación de los mismos a partir del siglo XIX.
Gustavo Adolfo Bécquer, se nos anticipa con este verso:
Va abriendo paraísos y cerrando ataúdes.
Por sesentitres años fuiste de amor testigo
tu pupila bendita, fulgor de la mañana
tu misterioso amor abre nueva ventana
con mi alma enamorada rezando a Dios bendigo.
La primera estrofa, alude a la fecha de matrimonio, cuando bendecidas por un sacramento se encuentran dos almas, en la que rodeados de sus más allegados, con la natural emisión de una fresca mañana el sacerdote salesiano bendijo esa unión. Un altar lleno de flores/ alegraba ese día/ sentido amor en María/ todo se veía a colores.
Con la estructura de un alejandrino clásico, elegíaco escrito desde el dolor y el recuerdo de la persona amada. La voz poética se dirige a ella en segunda persona, refiriendo los momentos dulces y felices vividos en su compañía. MISTERIOSO AMOR, un recurso catártico que nos expone la emociones, ESPECIALMENTE EN EL ALMA DE LA PAREJA, en el intercambio de anillos o en los votos, pues la ceremonia religiosa, se convierte en uno de los momentos más mágicos y emotivos de la celebración.
Este poema en particular, deja en mí, un impacto profundo. Intento corroborar, dejar mi verdad y testimonio de mi agradecimiento a Dios, Nuestro Señor por el regalo que me hizo al proveerme a una mujer que levanto mi vida, que me hizo feliz, y que dejó hijos sanos por el poder del Espíritu Santo.
Nos lega cruz bendita, con mi pedir lo hostigo
envejecer, morir, pensarlo sangre emana
Jesús dispuso, el éxodo, coexistencia humana
su voluntad cumplí solo Dios es testigo
La segunda estrofa da un cambio y contribuye a crear un clima más espiritual, más sereno pero no por eso incomoda que se presente el lamento, por un lado agradece el paso de la vida y luego se disculpa por sus fúnebres y contiguas peticiones. El verso que le precede, igualmente, primero acepta la voluntad divina que nos enseña que nacemos, envejecemos y morimos, y luego, deja al descubierto el grande y desgarrador dolor que produce la pérdida del ser amado. Para después cerrar: Con gran confianza que nos sometimos a su divina voluntad, que es el amor y la Misericordia misma.
Afirma de esta manera, “TESTIMONIO” El título de todo el poema, vinculando la veracidad de la existencia en el cumplimiento de un sacramento.
Gustavo Adolfo Bécquer
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.
.
Todos fuimos cercados y de amor rodeados
que la muerte es misterio, no supe que sintió
se le brindo consuelo sacrosantos cuidados
Es bueno testificar, y aquí doy mi testimonio personal, real, enteramente humano, en primera persona, que gracias a su misericordia, no me desespero comprendiendo de que si bien vivimos en el mundo, que cometemos muchas faltas y al reflexiona, nos duele, y luchamos por reivindicarnos. Que cuando nos toca afrontar la muerte, nos revelamos, más en esta desastrosa época del Covid. Y que totalmente inútiles no comprendemos que siente ni como poder ayudarle. Y naturalmente que nuestra flaqueza., obedeciendo, con pureza la entregamos a nuestro ser superior.
.
Quizá ella preguntaba ¿Por qué no lloré yo?
enjugue el llanto, y vi …. ¡Sus párpados cerrados!
Yo le bese la frente, “Sin lamento, expiró”
A un año y medio de la partida de mi esposa, sumido en mi soledad, en mi silencio de medio día, aun viendo el brillo de su sonrisa y escuchando sus dulces palabras, sé que Dios la había la destinado a ser mi esposa, formar un hogar, una familia, a dejarnos su vida. Yo vi lánguidos sus ojos, luz en su semblante, la vi rezar muda la boca, purísima y yerto doliente. Se enfermo y Dios no quiso que sufriera, soporto durante 6 años muchas incomodidades, sin una queja, y Dios bendijo a su hija franciscana para ejemplo nuestro y se la llevó con su sonrisa resignada cuando en sus manos una estrella le brillaba.
Ruben Dario
Sé Amparito, mi reina mi tesoro
Descansa en mis palacios solitarios
Duerme. Yo encenderé los incensarios
Y junto a mi unicornio cuerno de oro
Tendrán rosas y miel tus dromedarios.
- Autor: Rafael Mérida Cruz-Lascano (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de noviembre de 2021 a las 18:12
- Categoría: Fecha especial
- Lecturas: 29
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.