IMPRESCINDIBLE APOYO
Decía Arquímedes: Dame una palanca y un punto de apoyo y moveré el mundo.
Es una petición con excesiva certeza, aplicable en cualquier inesperado instante,
el ser humano es aquel terrícola totalmente dependiente, inclusive moribundo,
el orgullo nos obnubila y pensamos que fue innecesaria aquella etapa gestante.
Desde el momento de la concepción requerimos numerosos cuidados especiales,
la madre debe abstenerse de inmensidad de actividades procurando el bienestar,
aparecen períodos críticos los cuales hay que superar porque se tornan cruciales,
ese sacrificio realizado elimina de tajo, en un futuro bastante cercano, el malestar.
El supremo bastión descansa en nuestros progenitores, así pronto lo olvidemos,
ellos, en su mayoría, soportan estoicamente incontables sacrificios y privaciones,
son escasos los sarmientos que reconocen los desvelos; la mayoría no podemos,
se prefiere el disfrute desenfrenado, se aduce el estrés y entramos a vacaciones.
A mayor majestuosidad y altura posean los edificios, óptimos serán los cimientos,
las bases se programan antisísmicas, con máxima elasticidad y extrema tolerancia,
allí interviene el cuidado de los ingenieros y aplican con sumo rigor conocimientos,
lástima que una gran multitud de errores se cometen por arrogancia e ignorancia.
Jaime Muñoz, noviembre 2 de 2021
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Autor:
jamunoz (
Offline) - Publicado: 3 de diciembre de 2021 a las 06:30
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 50
Offline)
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