Veo en la luz de tus ojos
hermosura y sentimiento.
Luz, que en vano el sol imita
sin lograr el mismo efecto
en una rosa alborada
o en un ocaso perfecto.
Veo en tu cabeza de oro
el blondo de tus cabellos
como las mieses doradas
al paso suave del viento;
rizando olas de amor
que embisten contra mi pecho.
Veo en tu boca de nardos
dulce atracción y deseo
que arrojan tus labios rojos
como las llamas del fuego;
quemándome en la locura
por morder de ellos tus besos.
Veo en tu talle de diosa
la razón de mi desvelo;
sugestiva seducción
que me lleva hasta el anhelo
de una caricia amorosa
por tus curvas con mis dedos;
de hacer presas en mis manos
las palomas de tus senos;
y juntos estremecer
en la hoguera de ambos cuerpos.
¡Amarte toda la vida…!
se me hace exiguo el momento,
por eso quiero contigo
forjar un vinculo eterno;
teniéndote en esta vida,
viajando en la otra al cielo;
y si este amor es lujuria
de la mano hasta el infierno.
16 de Julio del 2.021
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Autor:
Rafael Huertes Lacalle (
Offline) - Publicado: 8 de diciembre de 2021 a las 03:52
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 124
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Miguel Reyes, Kapirutxo, Aida ☘️💟💥💫, Jorge Horacio Richino, lacarmentere, alicia perez hernandez, Hugo Emilio Ocanto
Offline)
Comentarios2
¡Un amor así! ...también quiero.
Qué obra por Dios! escrita divinamente.
Saludos genial poeta
Muchas gracias. Un saludo cordial.
Muy bello poema, poeta.
Gracias por compartir.
Saludos, amigo.
Las gracias siempre a Vd. por la visita. Un saludo cordial.
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