Muerte que rueda:
de noche y de día,
de pies a cabeza,
repleta de flores,
mi ánima enferma
clama tu nombre.
Nada me queda
de esta agonía
que me condena,
y mi voz rompe,
y mi piel hiela,
dejándome inmóvil.
Mis venas secas:
raíces podridas,
amargas y huecas,
faltas de amores,
ya casi muertas,
claman tu nombre.
Muerte que acecha
a la efímera vida
con faz esquelética
y traje de seda,
llévame a ella
dondequiera repose.
—Felicio Flores
- Autor: Felicio Flores (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de diciembre de 2021 a las 21:10
- Comentario del autor sobre el poema: A veces, o la mayoría de las veces, hay que dejar que los poemas reposen. Creo que ahora sí dice lo que debe decir.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 38
- Usuarios favoritos de este poema: Aida ☘️💟💥💫, Martha patricia B, alicia perez hernandez
Comentarios2
Si amigo a veces hay que dejarlos macerar para que examen su esplendor. Y a ti si que se te da. Abracito.
A veces gana la ansiedad 🤭 Muchas gracias Martha.
Un día la muerte va a llegar...
y esa no avisa...
placer saludarte y leer
Sí, aunque morimos muchas veces antes de morir realmente. Gracias por leer. 🙋
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