¿Cuándo su corazón podré alcanzar?
Cuando trescientos mil lobos marinos
interpreten sus cantos asesinos
y las focas no choquen al bailar.
Cuando los monos de Madagascar
la monten cortejando a los pingüinos
con ritmos africanos y latinos,
sabiendo que no hay nada que rascar.
Cuando camellos del mediterráneo
se alimenten de alubias, esas vascas,
mezcladas con fabada, sin peder,
angulas de verdad, no un sucedáneo,
pagando cuatro chavos en las tascas;
Entonces, solo entonces... a saber.
- Autor: Kapirutxo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de enero de 2022 a las 13:30
- Categoría: Humor
- Lecturas: 58
- Usuarios favoritos de este poema: Aida ☘️💟💥💫, Antonio Miguel Reyes, Freddy Kalvo, Hugo Emilio Ocanto, Ninfa de cristal 🧚, José Antonio Artés, alicia perez hernandez, Jorge Horacio Richino, .........................., Ann🌼, 🖤🍃Meigajaz ☯💞, Alberto Diago
Comentarios9
Tremendo tremendo !!, y esos juegos de palabras .. chuchi chuchi !!
👌👌
Un soneto versado por un maestro
Felicidades
Un fuerte abrazo
La certidumbre mezclada con incertidumbre en un soneto muy ameno con un ritmo esplendoroso.
Abrazos fraternales mi estimado Kapirutxo.
Tlemendo y malavilloso, poeta.
Me alegras el día, muchacho.
Un abrazo.
Y si, evidentemente va a ser muy difícil alcanzar su corazón!
Muy bueno!
Un gran abrazo!!!
Vaya un sobelbio chino
con tanta gracia y salero
y su humor sin desespero
que ya parece un cochino
salvado del filo de asesinos
en navidad, pero viene enero
o tal vez el palo marranero
sea en el mes de uvas y vinos
lo cierto es que de San Martín
tiene su sentencia escrita,
dice el loro qué buen vacilón
del parlanchín repita que repita,
por sobrepeso en un balancín
hasta el rabo es chicharrón.
Ja, ja ja. Curiosamente el pueblo donde vivo se llama San Martín
Gracias por acompañar con tu gracioso sonetillo. Un abrazo
Eres un crack mi querido Kapi, me encantó, gracias por la sonrisa amigo mío...
Abrazos infinitos
Jaz
excelente soneto lleno de incógnitas , un abrazo desde Tarragona.
Me ha gustado tu poema y me ha recordado a uno mío. Aquí va:
EMBOBAMIENTO
En lo más septentrional, los reptiles
me meten sus patas en mis orejas,
en tanto que bizquean las ovejas
que pacen en los verdosos abriles.
Y, tras los meridianos, los mandriles
están encarcelados entre rejas,
totalmente aislados de sus parejas
que gritan ´´libertad´´ en los madriles,
mientras que en las zonas meridionales
es donde cosquillean las hormigas,
esos bichitos casi racionales
que parecen querer ser mis amigas
tal como están royendo los pañales,
pero solo buscan..., del pan, sus migas.
Muy bueno jajajaja.
gracias por la visita
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