Tu...el poeta

Tu…

habitante del silencio,

ciudadano del vacío,

coleccionista de nostalgias…

que recorres el laberinto de la nada…

arrastrando las cadenas del dolor,

un dolor incontenible…que se hizo pena,

una pena inagotable…que se hizo angustia…

y la ansiedad como condena.

 

Tu…

transeúnte ermitaño que te alejas,

vas sin rumbo escondiendo sentimientos,

vas archivando los suspiros…

en algún rincón del desengaño,

y lo sometes al acertijo de las dudas.

 

Peregrino tu…sin destino…

que deambula en el insomnio…

intentado evaporarse de algún sueño…

y alucina con despertar en alguna realidad iluminada.

 

Tu…

solitario errabundo encariñado de la luna,

que disfruta cada noche de su brillo,

que contempla con delirio su escabrosa lejanía…

allá en el furtivo escenario de las sombras.

 

Un bohemio tu…legendario…de viejas mañas,

de experiencias largamente meditadas,

que dan batalla a lo trivial de la rutina…

ingeniando amores fieles.

 

Tu…

trotamundos extenuado por tu exilio,

que descansas boca arriba …analizando al infinito,

te entretienes… enumerando estrellas,

y te solazas… dilapidando el tiempo…

pensando inútilmente en ella…

en tu musa…la intrigante seductora.

 

Tu…

un viajero inconsolable del futuro,

que transitas los instantes del pasado…

deseando enmendar alguna herida…

para alterar los episodios de lo vivido.

 

Tu…

un soldado en la incertidumbre del hastío,

con tu ejército de versos,

que vas tratando de acicalar la añoranza que te abruma,

y que aspiras acabar con tu despecho…

que clavado va…como agudo puñal...

en el lugar más sensible de tu pecho.

 

Tu…incorregible…

Tu…enamorado del desamor…y la tristeza.

Tu…el poeta.

 

Tu…incorregible…

Tu…enamorado del desamor…y la tristeza.

Tu…el poeta.