Padre mío
que estás en la celeste
morada de mi alma,
te saludo
con la más amorosa
voz de hermano;
¡ santificado sea tu nombre !
Díme las señas de tu reino;
intentaré llegar a él,
¡ convídame ! te ruego.
Dáme, y a los demás
dáles también,
todos los días un poco
de tu pan.
Olvida mis ofensas
e impúlsame a ensayar con el prójimo
ese grave y difícil ejercicio.
Dáme un alma rebozante,
si es posible con alas
poderosas, para cruzar,
sin mancha,
turbulencias agobiantes
y un día trascender lo absoluto
ya libre para entonces
de todo mal, amén.
Poema de José Luis Villamizar Melo, poeta Nortesantandereano. (Q.E.P.D.)
Cornejo - N. de S. - Febrero 17 de 1.931 - Agosto 17 de 2.010
- Autor: Untalivan ( Offline)
- Publicado: 8 de septiembre de 2010 a las 14:03
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 119
Comentarios1
Todos los méritos de la poesía en ese canto de mi admirado y querido cucuteño de corazón de oro y voz de agua bendita... El Poeta Villamizar ha sido, y será para siempre, vibrante campanario de las almas en vilo....
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