Comienza un triste momento,
un antiguo tormento,
siempre jugando,
siempre escapando,
de aquellos seres viles,
que vienen a por miles,
en un momento dado,
perdí lo más amado.
Recuerdos pasan fugaces,
en cambio, otras veces,
me hacen llorar,
detestarme y rabiar,
que paradoja,
la que mi mente aloja,
me ven feliz,
no saben que soy infeliz.
Me ven reír,
no saben qué vivir,
para mí es un suplicio,
se ha convertido en vicio,
ocultar mi dolor,
maquillarlo con dolor,
alegría para los ojos,
polvo de suspiros,
sombras de insomnios,
coloretes de un adios,
sangre para los labios,
desconfiar es de sabios,
la gente es manipuladora,
traicionera y engañadora.
Quería confiar,
¡Por última vez confiar!,
sin embargo, solo me fallaron,
por mis ojos rodaron,
gruesas lagrimas,
y pongo en estas rimas,
toda la rabia contenida,
ahora me encuentro escondida,
entre muchos muros,
intuyo días oscuros,
pero quiero ver,
y no quiero nada saber.
He caído en un pozo,
en el cual me destrozo,
pero todo será por mi bien,
¡al final estaré bien!...
- Autor: Mareth (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de enero de 2022 a las 14:25
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 32
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Antonio Miguel Reyes
Comentarios3
INTERESANTE PASAR A LEER TU DECIR Y SENTIR POETICO.
Eso no es sufrir, míralo de esta manera, solo es una lección
de estas verás un millón
la vida no es traicionera
solo es una quimera
que esconde mal solución
Ánimo sigue con tu pluma que no lo haces mal
Un saludo
Saludos Mareth... sea lo que sea ¡estarás bien!!! Un abrazo.
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