Se le escapaban los días
Entre los dedos de su vida
Incapaz de cerrar el puño
Y comenzar a guardar los minutos que perdía
Pensando que hubiese pasado si la vejez eludía
La letra con la que escribía sus días, sus memorias
Comenzaba a torcerse
Enredarse y volverse incomprensible
Por lo que sintió la necesidad de poner punto y aparte
Antes de que el relato,
Adquiriendo excesiva autonomía
Le delegara un papel secundario
Se acercaba esa parte de la vida
En que cada decisión transcurría
Y el tiempo que le tomaba era vida gastada
Vida que tenía y la regalaba
No veía el momento de dar el primer paso y ayudar
Dedicar esas horas de vida a otro ser humano
Que aún no vivía
Y la experiencia le faltaba
Pará entender que este camino es una poesía
"vos tienes tu metáfora y yo.. Bueno yo tengo la mía"
Iba construyendo recuerdos en las personas que conocía
Dejaba atrás el presente y las memorias derruia
En esos días lo vi
Sentado sobre la cama
Se quedó mirando sus manos como en un ejercicio improvisado de quiromancia
Tratando de leer alguna señal, imaginando cuántos objetos, texturas
A largo de su vida llegaron a tocar
Con bamboleo y cansado caminó a la biblioteca
Donde en la última percha, estaba aquella fotografía que de joven
Con cámara de la época
Su retrato llegó a guardar
Su mirada lo trasladaba a ese tiempo, en donde pensaba que muchos años después donde la vejez llenaba de arrugas sus manos, volvería la vista atrás a esos años convencido, de que toda la incertidumbre y la espera habrían tenido algún sentido
Miró hacia arriba y en su reflejo añoso creyó ver que su vida corría como río turbulento, sin dirección alguna, con incertidumbre de desbordar su caudal, dañando y lastimando a quienes quería..
Queriendole sacar minutos a las horas, y horas a los días...
Pero el todavía se sentía joven, tal cual se miraba en aquella fotografía,
Joven como para desbordarse estrepitosamente, para pensar que estaría dictaminada aquella única decisión divina definitiva, joven para rendirse sin agotar todas las posibilidades y para encaramarse a un solo deseo que dependiera únicamente de una sola palabra: " Familia"
Y así cuando llego el momento como a las siete y media u ocho menos cuarto elevó una plegaria al cielo donde lo único que pedía y por el cual le vi dar gracias, era por un día más de vida..
- Autor: LordAnton ( Offline)
- Publicado: 18 de enero de 2022 a las 01:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 39
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