Una oportunidad

Yo solo le pedí una oportunidad al cielo,
un poco de calor en esta capa de hielo,
sentirme correspondido era mi anhelo,
en tu cálida sonrisa hallé mi consuelo.

Aquí te vi pasar y el tiempo se detuvo un instante,
fue un llamado para querer sentirme como antes,
pues me describía desesperanzado y muy distante,
pensaba en un “hola” y lo que vendría más adelante.

Luego te conocí y me demostraste fortaleza,
siento un deslumbre no solo por tu belleza,
es tu tacto o sentir tu aliento como la realeza,
es el corazón que se refugia en la delicadeza.

Dentro de mí no me podía permitir temer,
sentía latidos que solo a ti te podían pertenecer,
admiración o un goce había que algo me animaba,
una esperanza viva si las cosas contigo se daban.

Y sucedió en el primer beso correspondido,
un contacto que dejo a cupido sorprendido,
fue una mezcla de emociones que fluían,
donde la felicidad de mí ya no huía.

Si pienso como hubiera sido tomarlo con calma,
como controlaba la pasión si completas mi alma,
sí piensas que me apresure en una decisión delicada,
mi felicidad es real y no viene de un cuento de hadas.

Entonces puedo desconocer y no saber que hacer,
sin agobiarte porque aún hay mucho por conocer,
puedo ver que aún hay un vasto camino por recorrer,
pero puedo prometer al cielo lo mucho que te voy a querer.