Una infinita he incontrolable amargura de esas que arrancan la vida más rápido que el mismo tiempo.
Los días son atacados por mortales sentimientos que plantean la idea de que todo acabe, mi cabeza lo planea lo imagina y por poco lo siente.
No se si te amare u odiare por siempre, solo sé que estas aquí caminando cada senda de tinieblas de mi alma, opacando cada intento por vivir, lastimando las heridas que intentan recuperarse.
Estoy muriendo,
El refugio en aquel cuerpo me lleva un rato por aquel destino, uno que dura un beso un beso que controlo en el tiempo y el placer, placer de un momento de sosiego uno que acaba pronto y vuelvo a lo real a mi verdad que me llama por tu nombre que es mi tormento.
Padezco lo que siento lo casi inexplicable de una tristeza que ya reflejo en el espejo y mis palabras liberan el odio y fervor de mi sangre.
- Autor: Antares (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de febrero de 2022 a las 04:38
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: Paco Jose Gonzalez, Antonio Miguel Reyes, alicia perez hernandez
Comentarios1
Es importante SENTIR porque cuando ya no SENTIMOS es que ya estamos muertos.
saludos poeta
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