El origen de la contaminación mental, que desluce nuestra vida, reside con frecuencia en la costumbre de juzgar nuestros actos y los de los demás.
Quien juzga, termina emitiendo un veredicto, al que sigue el castigo pertiente.
Pero en éste tipo de dinámicas, el más castigado es el propio juez.
Este mal hábito,suele ir acompañado de una dependencia de las opiniones ajenas, provocando padecimientos, que no aportan ninguna ventaja, y si muchos inconvenientes.
Los pensamientos negartivos recurrentes, van asociados a un afán de perfeccionismo que oculta el miedo al fracaso.Resulta bueno, para salir del atolladero, " Buscar el éxito y no la perfección" Nunca renunciar al derecho a equivocarnos, porque perderemos nuestra capacidad de aprender cosas nuevas, y avanzar en la vida.Si nos enfrentamos a nuestros miedos siendo humanos, nos convertirermos en personas más felices y producticvas...
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Autor:
emiliodom (
Offline) - Publicado: 15 de febrero de 2022 a las 05:51
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: Paco Jose Gonzalez
Offline)
Comentarios1
Gracias, es usted una luz de sabiduría, que alumbra un poquito cada día, y que ayuda a entender los tortuosos caminos de la psique humana.
Aunque yo pueda pensar que la química, los neurotransmisores , la parte neurológica puede pesar más de lo que entiendo que usted piensa( o me da esa impresión), he de tener en cuenta que del funcionamiento del cerebro como órgano vital principal del ser humano se sabe todavía muy poco, mientras que del comportamiento , de la psicología como estudio de la conducta humana se tiene una base más amplia , por lo cual, puede que la conducta propia y del entorno (Habitat vivendi),sea el detonante de los procesos antes citados, y no al revés, la ciencia lo dirá con el tiempo y el estudio.
Un saludo afectuoso.
Hola Paco José. En efecto así están las cosas, del cerebro al día de hoy, a pesar de los muchos adelantos científicos poco hemos avanzado en su conocimiento , fisiología y patología, entiendo que es el órgano más complejo de nuestro cuerpo, viene a ser como la placa base de una computadora, pero mucho más complicada por sus interacciones neurológicas y eléctricas.
Me alegra saber que sigues paseando por mis letras del modo en que sueles hacerlo.
Un saludo cordial
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