La mar infinita duerme conmigo.
Me mece, en su cuna de soledad,
saladas nanas me cantan las olas
mientras duermo…sueño, en libertad.
La mar, como nadie, intuye, sabe
de penas, tristezas y desesperos…
-escuchad-.
Promesas y juramentos se lleva
al mausoleo de su profundidad.
La mar, compañera de navegación
a veces sonríe, a veces con crueldad,
me salpica las entrañas y en versos,
se cuela, con la espuma de su lealtad.
La mar, como mujer, es inmensidad.
Antonia Ceada Acevedo
- Autor: A.Ceada (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de febrero de 2022 a las 13:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
Comentarios2
Mujer Agua. Bellas letras amiga poeta. Abracitos
Hace mucho tiempo, se creía que el mar era el punto de unión de las almas lastimadas, que cada gota de lágrima que caía a causa de una desgracia, desembocaba allí. Me gustó mucho me hizo recordar a esa corta creencia.
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