PARA ARGANTONIO

Gelzaros

 

 

SUBIDÓN

 

 

Cuando subiendo en el metro me encuentro

me gusta olfatear profundamente

para captar la esencia de la gente

según emana desde su epicentro

 

ya que la inhalación en que me adentro,

en otros lugares no es tan frecuente,

y ese esnifar, tan cerca de la fuente,

no siempre, en mi camino, me lo encuentro.

 

Perfumadas esencias de humanidad,

que me estremecen la pituitaria,

desequilibran la gran pasividad

 

de mi vida aburrida y rutinaria,

y me provocan esta voracidad

de morder una nalga procesionaria.

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Comentarios +

Comentarios1

  • María C.

    Uff, jeje, cuidado que mordiendo así de lado, puedes acabar enre rejas apresado...
    Un saludo cordial.

    • Gelzaros

      Bueno, esta tontería (pensaba en Hannibal Lecter) al menos me ha servido para saber que si algún día pegase un bocado terminaría apresado, en mi país y en los del otro lado.
      Saludos

      • María C.

        Oh está bien tener sentido del humor y ojalà todas las tonterias fueran asi, amigo, pero hay otras tremendas que esas no se deberían hacer porque se convierten en bromas pesadas.
        Un saudo.



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