A mi Abuelo, Padre e Hijo

Mi viejo adorado e imponente Abuelo, el que me enseño el valor de dar sin esperar nada a cambio, solo la sonrisa alegre del que recibe con humildad y al que se le brinda la mano para poder salir adelante. El que me dio un gran amor, con el que pase grandes tardes en el fresco del bohío recibiendo sus concejos y sacando provecho a cada minuto de su grata compañía.

Mi amado cascarrabias Padre, el que siempre me demostró que nada es gratis, que no hay como lo qué se gana con el sudor de la frente, que el ser honrado y honesto gratifica el alma y corazón, que no importa la labor que se desempeñe, desde que se haga con pasión y esmero, siempre la recompensa llegara multiplicada en alegrías y prosperidad.

Mi deseado y esperado Hijo, con el que aprendí cuál es el verdadero amor, el que me ha dado infinidad de alegrías y me enseño a ser padre y valorar cada día más lo que significa tener una familia propia, con el que veo mi reflejo y me ayuda a esforzarme más y más, por ser digno de su amor y en la espera que el tiempo que vivimos juntos sea cada día mejor.

Abuelo, padre e hijo, por ustedes soy lo que soy.

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