Bien venga el amor de Dios,
y llenarme con su misericordia, de su perdón pleno,
para serle digno en alma y cuerpo,
existiendo solo para Él, pues para mi no cuento...
Oh mi Señor, que a Ti clamo,
con tres puntos en cruz sobre mi pecho,
y en la boca el gran beso
que hila con su sangre la salvación del Universo...
Bien venga el amor de Dios,
y a este hombre humilde su gracia y bendición,
pues no más, Cristo te pido,
que cuides mis pasos, al ser mi inseparable amigo...
Oh Dios mío, que a Ti te clamo,
sin importar el paso de los años, la enfermedad o el dolor,
porque Tú siempre estarás conmigo,
hasta ese día que al fin encuentre tu Sagrado Corazón...
- Autor: el brujo de letziaga (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de marzo de 2022 a las 04:11
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 67
- Usuarios favoritos de este poema: Alexandra L, migreriana
Comentarios1
Dios es aliento y consuelo, es fuerza, y valor, vive en nosotros y nosotros en su sagrada memoria. Placer disfrutar de tu poema, esperanza, de ese día mejor en la gracia de Dios.
Un saludo cordial, Alex.
Gracias Alexandra por tu visita...desearte en estas fechas una feliz semana santa, y te dejarte ante todo mis bendiciones...Un fuerte abrazo!
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.