Tus Dos Corazones

Siempre que me levanto veo caer mi orgullo ante tus deseos, entonces me pregunto si podre encontrar en algún sitio de mi corazón sangrante donde te pueda guardar como lo que eres… solo un accidente, un error que me hace feliz pero que también me ha hecho diferente. Siempre que quiero dar un paso adelante tu cobardía me golpea sin compasión alguna, entonces me pregunto si equivocarme fue lo correcto o acaso era lo que tú más anhelabas… ¿es que acaso no entiendes que me quemo por dentro de solo recordar todas las lagrimas que derramaste? mientras el reflejo traslucido de nuestra historia se evapora en el aire derritiendo mi fe y penetrando en mis huesos cual frio invernal acaba con la tranquilidad de mis deseos. Es entonces cuando veo caer tu dolor en forma de lluvia cristalina mientras yo sigo ahí esperando no empaparme con tu tristeza… Es así como te veo es justo así como realmente te siento… un hombre triste con dos corazones, donde uno te condena a la eternidad de un destino que se ligo al mío porque tu así lo quisiste, mientras el otro no existe. Tengo heridas lloronas que nunca sanan, ellas aun están en mí como una advertencia para que jamás olvide que el amor duele en la piel y también en el alma, es ahora cuando intento despertar y no dormir por siempre porque si no lo hago nuestra canción se convertirá en nuestro himno de despedida. Ya es tarde, es demasiado tarde... el tiempo se escurrio en nuestras manos apezar de que sabiamos que era nuestro, ahora solo puedo ver el reflejo de aquel fantasma que me abandonó... mi otro yo