"DIARIO DE VIVENCIAS DE MI PRIMER INTENTO DE LLEGAR A LA ANTÁRTIDA" (Capítulo 7)

14to. Día de Navegación

          (18/3/1991)

“UN DÍA GRIS”

    Todo proyecto, toda aventura, todo sueño tiene sus momentos de incertidumbre, sus instantes llenos de dudas, en los que el horizonte del futuro se nos presenta gris y lleno de nubarrones.

    Y… esta parada, casi obligatoria, por desperfectos mecánicos en nuestro buque, el ROU 24 “Comandante Pedro Campbell”, no nos ha permitido disfrutar a plenitud las maravillas que nos regala la capital de la Tierra del Fuego.

    No sólo el gris impenetrable de un día nublado, muy frío y con persistentes lloviznas nos están limitando, empequeñeciendo sino, que por sobre todo ello, el pálido tono de nuestro ánimo nos hace sentir como achatados, alicaídos de ánimo, sin voluntad siquiera para intentar revertir esta situación…

    Las horas, los minutos, los segundos parecen no transcurrir, parecieran no pasar…

    Lograr llegar a la Antártida y poder visitar nuestra Base Científica Antártica Artigas, hoy por hoy se nos presenta como un sueño lejano y aparentemente, para nosotros, casi imposible.

    ¿Se podrá revertir esta situación?...

15to. Día de Navegación

          (19/3/1991)

“NUEVAMENTE EN NAVEGACIÓN… ADIÓS USHUAIA”

    Después de casi siete días de estadía en Ushuaia, la Ciudad Fin del Mundo, donde aprendimos a convivir con sus habitantes y, porque no, a quererlos entrañablemente, reiniciamos nuestra navegación a  bordo del “Campbell”, el ROU 24 de nuestra Armada Nacional.

     En el correr de la jornada nos fuimos enterando por boca del propio Comandante del buque, el Capitán de Fragata (Cuerpo General) Julio Dodino (hoy Capitán de Navío Retirado), conocido por todos como el “Bolita Dodino”, de varias novedades, algunas de ellas, lamentablemente nada halagüeñas y que, por supuesto, han influido muy negativamente en nuestro espíritu, deseoso de nuevos conocimientos.

    Primero  se nos comunicó a todos los periodistas, que el buque no iba a poder llegar a la Antártida puesto que no se han dado las condiciones meteorológicas adecuadas para poder cruzar, sin contratiempos, el Mar o Pasaje de Drake, navegación por cierto, casi siempre, bastante peligrosa

    Segundo, nuevamente dirigiremos nuestra navegación hacia la ciudad de Punta Arenas, para poder desembarcar toda la carga que llevábamos con destino a la Base Científica Antártica Artigas.

    Y tercero, esperaremos atracados en puerto hasta que lleguen y se embarquen todos los científicos de nuestra Base Artigas, los que regresan a Montevideo, luego de dar por terminada su campaña de investigación antártica de verano.

    Aunque la esperanza es lo último que se pierde, según lo que se dice popularmente, vemos alejarse cada vez más las posibilidades de cumplir nuestro anhelado sueño de llegar a la Isla Rey Jorge, Antártida, donde se encuentra enclavada nuestra base científica Artigas.

    En el final de nuestro resumen de este día, un recuerdo lleno de nostalgia hacia la ciudad que nos cobijó, como verdadera, dulce y tierna madre, en su cálido seno… Adiós Ushuaia. En nuestro corazón siempre te recordaremos. Y… simplemente, muchas gracias.

    Continuará…

 Roberto Bardecio Olivera

          (Marzo de 1991)