Pulimentando el aire,
tan cálido, zona agreste,
donde caben marineros,
los trajes impolutos y las manos.
La nieve, copiosa
mirada, donde anteceden
los giros de la luna.
Incendio los lugares
del pasado, meto en mi albornoz
secado, los labios sin besos
del arroz intermitente.
Veo tu ponzoña averiguarse
con sus perros lanudos y grasientos.
Al espejo le sobran unos kilos,
margen difuso de los días,
ópera o martillo de herejes,
subterráneo donde la ternura
vende su zapato más sangriento.
Puliendo el aire, cálido como
una ventana, exterior dinamitado,
seca empuñadura férrea corpulencia.
En el destello de tu anillo nupcial,
todavía se resuelven los ecos de las aguas.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 16 de mayo de 2022 a las 03:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: Lale Neda, Ben-., Aliscrist ✨, Anton C. Faya, Rafael Huertes Lacalle, 🖤🍃Meigajaz ☯💞, David Arthur, Haz Ámbar
Comentarios3
Sonidos como de relámpagos se oyen en estos versos
Un afectuoso abrazo poeta
Gracias Carlos, un saludo afable!
Muy bueno el juego de imagenes Ben... Dices sin decir...
Te agradezco Anton tu sinceridad. Un abrazo fuerte poeta!!
Que arte tienes para dibujar las imágenes, gracias ...
Saludos amigo es grato regresar...
Abrazos miles
Jaz
Gracias Jazz, en verdad, cuánto tiempo! Un abrazo en tu retorno y suerte-.
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