Madre,
No el mejor hijo, no el último
Pero la realidad madre, la realidad
Cuando la tienes ahí, cuando descubres ese holocausto oscuro y gris, todo te absorbe,
Te ves rodando entre las tinieblas, te absorbes hasta el vacío
Eres nadie, eres nada
Polvo y más polvo,
Sumergido hasta lo más profundo
Cual gusano de tierras abisales
Descubres olores de muerte
El Horror del infierno vibrante hasta la garganta, atrapado por las lágrimas
Dejas a un lado cualquier gesto humano
Odio, resignación, ansiedad
Depronto, no tan casual sino tan obvio
Viene un rayito de claridad
Te toma de las manos
Te saca de la peste, te sube hasta la profundidad de las tierras altas
Naturaleza, aire, brisa, libertad
Plena libertad,
Las luciérnagas en tus ramas,
Las estrellas en las flores
Luz plena, Luz en el jardín de tu alma
Aclara mucho más hasta la calma
Hasta la paz, por donde brotan las gotas cálidas del amor, por donde no pasa la razón, por donde nace la verdad, justo ahí, en ese mismo sentido,
En esa ruta volví
Y estoy aquí,
Rendido ante tus adormecimietos
Como sabes
Volver para partir, partir para volver
Nunca te volveré a decir adiós
Y en ese dolor sumergido
No tan profundo
Te pediré perdón.
- Autor: Zoroastro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de mayo de 2022 a las 14:45
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 23
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