MARINA Y SU MADRE SE VAN DE BOLOS

MARINA Y SU MADRE SE VAN DE BOLOS.

Marina comienza a tomar clases de teatro, por un corto tiempo, cree que su vida sería eso, ser actriz.

Mas, rápidamente se difumina, cuando entra en la escuela de arte dramático y ahí en tiempos duros de dictadura, la toman como subersiva,  ya que representa, un monólogo de una criada de la Casa de Bernarda Alba.

Alguno de los directores, en ese momento, le dice-tú, siendo una chica joven, soñaría con hacer un pasaje de Julieta, o de Rosita la soltera cuando es joven, ¿por qué eliges el de una criada de setenta años? Este monólogo lo había, escuchado prácticamente, durante todo un año cuando se había ido de bolos, con su madre a representar, La casa de Bernarda Alba, donde su madre hacía de Poncia  y ella de Magdalena ,una de las hijas de Bernarda.

Fueron tiempos felices, de recorrer el país, llegando a las ciudades y pueblos del interior, donde las recibían con mucha calidez y simpatía.

Era todo un acontecimiento, la gente se vestía formalmente, para asistir a la función .Se podía sentir desde el escenario el aroma de los perfumes, que el público se ponía a mansalva.

Luego de la obra, lo más lindo era, la reunión de todas con el director, donde, también su señora, representaba el personaje de Adela. Iban a algún restorán, que previamente habían dictaminado un menú. Viajaban en autobús de línea, y llevaban la escenografía en la bodega del mismo o a veces la mandaban antes, para que alguien del teatro, fuera acomodándola en el escenario. Una utilera, que hacía los ruidos que supuestamente estaban fuera de la casa.En su mayoría todas mujeres, que se habían conocido de diferentes grupos del taller de teatro. Algunas, tenían más experiencia. Para Marina era su primera vez, no así para su madre que había sido cantante lírica, y tenía una trayectoria importante en el país.

Para la madre de Marina, hacer teatro era un gran disfrute, porque no se veía agobiada y sufriendo la presión, como cuando cantaba ópera, que la pasaba realmente mal, los días previos al estreno estaba muy nerviosa, pasaba noches en vela.

Dejaba de concurrir a eventos familiares para cuidar su voz….Una serie de convencionalismos, que eran limitantes y muy exigentes. Las tablas del teatro, fueron muy diferentes. Marina la veía realmente gozar, en su interpretación de Poncia, y también como ser, una persona tremendamente conversadora, socializar con el grupo y el público que se acercaba a esperar, a la salida de los artistas, para felicitarlas y tomarse algunas fotografías.

Los cuartos de hotel, eran compartidos con las compañeras.

Ahora Marina y su madre estaban en la misma habitación, se transformaron en lindos recuerdos, de su juventud.De aprendizaje y de resiliencia. Se reían mucho, y sobre todo las noches que compartían juntándose en la recamara, de alguna de las compañeras, a conversar y tomar té, algunas creo, que llevaban algo de alcohol, licor dulce, que las ponía más risueñas.

Retomando, a la escuela de arte drámatico, donde Marina había entrado en calidad de oyente, ya que la tendrían a prueba…

Ella que era puro impulso, en sus años mozos…. La escuela era un lugar muy frío, antiguo de techos altos, y había un calefactor de resistencia, que no funcionaba y ella sin preguntar, decide arreglar el enchufe, y se hace un cortocircuito.

Entonces la escuela, al día siguiente, decide suspenderla porque sin autorización, alguna, había hecho algo que no correspondía. Así es, que por quince días no podría concurrir, como sanción.

Eran vacaciones de invierno, y Marina se reencuentra con la otra parte de su familia que era exiliada,  en una ciudad  una de las más lindas del mundo, como es Río de Janeiro, donde todo el año es verano…

Al volver bronceada, y con mucha alegría y luminosidad que le había provocado el reencuentro con sus tíos y primos. Cuando llega a la escuela, donde los mismos compañeros creyeron que no volvería más, luego de la suspensión, empezaron a hostigarla y hacerle comentarios muy desagradables. Y es ahí que Marina, se va de la escuela, pero no solo de la escuela, se va del país por un año y medio, y regresaría, cuando ya había retornado la democracia.