Las heridas del alma
El cuerpo sufre y se abate, angustiando su placentera vida
El corazón sangra, se cura con el tiempo, pero no olvida
El alma llora desconsolada, por sus sangrantes y escalofriantes heridas
Gime y suspira por las ofensas internas, de las lesiones ocurridas
Las heridas del alma, se reflejan en el cuerpo, de avatares vivida
Las facciones del rostro, muestran su tristeza de llantos, de lágrimas adolorida
Las penas, el dolor y las tristezas, agobian el alma abrumada, sin ser escuchada, ni comprendida
Se hiere el alma, con el rechazo en el amor no correspondido, de los ardientes corazones
Se siente el miedo y el pánico, implorando el perdón para que no lo abandones
Se hiere el alma, con el abandono, en la soledad de las habitaciones
La embarga la tristeza acongojada, sin prestarle sus debidas atenciones
Se hiere el alma, con la humillación, perdiendo la libertad en sus expresiones
Se ataca la dignidad y la autoestima, con crueles y mordaces intenciones
Se hiere el alma, con la traición, arrebatando la confianza, en el interior de sus razones
Alevosía, que arrebata a la ira y al llanto del ridículo, en la soledad de sus reflexiones
Se hiere el alma, con la injusticia, con la vanidad y el ego, sin dar espacio a las explicaciones
La envidia mata el alma, el afecto, el amor y a los sueños, que acompañan sus imaginaciones
Se hiere el alma, con la decepción, con la ilusión, que embarga las alegres emociones
Con la soberbia, con la ira, con la rabia, desterrando las innumerables pasiones
Se hiere el alma, con la indiferencia, ignorándolo en el compartir de las reuniones
Es el peor pecado del ser humano, que lleva a la negligencia, arropándolo en sus preocupaciones
El alma es abstracta e inmortal del cuerpo humano y de la vida hermosa
Siente, piensa y se acongoja con sus sangrantes heridas, de angustias silenciosas
El alma es valiente y enfrenta los dolores, que la acorralan en forma cruel y peligrosa
Necesita espacio y lugar para pensar en su intimidad maravillosa
Las heridas del alma, se curan y se sanan con el amor de la familia, orgullosa y amorosa
Con la amistad leal y sincera, de saludos y cariños asombrosas
Hay que enfrentar el dolor del alma, que hace parte de la vida dichosa y valerosa
Las heridas del alma, dejan enseñanzas en su andar y de su camino respetuosa
El alma se alegra, cuando el cuerpo sonríe, con felicidades vigorosas
Las caídas del cuerpo, hacen ver valiente el alma, de sus fuerzas internas milagrosas
Las heridas del alma, las cura el tiempo, que pasa en forma presurosa
Dejando cicatrices difíciles de olvidar, que se convierten en penas de angustias llorosas y dolorosas
Las heridas del alma, recuerdan que somos humanos de la vida bella y esplendorosa
Perdonar las ofensas, las envidias, los egos, las vanidades, soberbias y rencores, que hacen ver del alma majestuosa, el amor de Dios, la bendición Todopoderosa.
“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga junio 09-2022
- Autor: Joreman (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de junio de 2022 a las 13:26
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 60
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.