Cuando llegue la hora...

Cuando llegue el día ...
Querido Antonio, hoy visite tu tumba, pero tú no estabas allí.
Tú estabas vivo, vivo en mis recuerdos de infancia, paseando entre los bancos de madera de mi escuelita de "Jardines del Mangas", si, tu estabas allí, al sur del mundo, te escuchaba hablar en la dulce voz de mi maestra de sexto año, doña Fausta Malleti, que nos leía tus poemas con fervor y admiración.
Estabas, en la voz de don Alberto Candeau en su discurso del 82 frente al obelisco, cuando  con voz de trueno dirigiéndose a ese mar de gente libertaria, nos decía, 
VIVA LA REPÚBLICA!!!.
Si querido Antonio, tú no estás debajo de esa lápida fría, en un país vecino, como dice el Nano Serrat, tú estás en todos nosotros, los que viajamos ligeros de equipaje, los que queremos un mundo más solidario, donde ser libre no se pague con la vida .
Si querido Antonio, hoy visite tu tumba y me fui feliz de no encontrarte allí. 
Te encontré entre la gente sencilla y solidaria de este pueblo catalán, gente que, como hace más de ochenta años, sigue recibiendo a los despojados de este mundo con los brazos abiertos.

Al venir aquí, en la entrada del pueblo  de Collioure se lee, "pequeño pueblo con gran carácter"  y eso es una realidad.
Si querido Antonio, hoy este hombre que ya peina canas, tomándose de la mano del niño que aún sigue vivo en mi, venido de lejos a ver tu tumba, aprendió que los hombres como tú, nunca dormirán debajo de una fría lápida de piedra y cal.
Diego El Quijote de la 🌹