Negro y oscuro

Ella se fue

Y junto con ella se llevó mis sueños

Dijo que nunca me abandonaría,

Pero sus palabras, sus suaves palabras, a ellas se las llevo el viento

Miro a la esquina y no hay nada

Observo las calles y no hay colores

Limpio la alcoba y en mí se impregnan sus olores

Intento ser firme, pero me quiebro y pierdo la calma

No se porque se marchó, y sinceramente no quiero entenderlo

Tal vez ella es inconsciente del dolor que causa desprenderme de sus besos

Espero que regrese al final del día

Y si no lo hace, entonces ya no tengo nada más que perder

Me quedaré desolado hasta que llegue la noche

La espero con la puerta abierta y con mi rostro deseando sus palmas

A ella le añoro con ansias de que vuelva y diga que me ama

Y si no lo hace, entonces que sea lo que Dios quiera y que sus gusanos me devoren