SYLVIA SALE A TRABAJAR

SYLVIA SALE A TRABAJAR

Sylvia había llegado, con su pareja y sus dos hijos adolescentes a un nuevo país. Eran nuevos inmigrantes. Ella había sufrido más el desarraigo, que sus hijos . Ellos rápidamente aprenden el idioma y su esposo como conocía el idioma por sus padres, se posicionó en su profesión.

Ella se ocupa de la casa y de que todo estuviera en orden, para cuando llegaban sus hijos de estudiar y su marido. Chateaba constantemente, con sus amigos, tenía demasiadas horas libres, y no se sentía que había aterrizado en otro país, la diferencia horaria. Pensaba que verían la misma luna, pero de otra forma....

Por fin entendía, que había leído sobre la luna, en el norte era mentirosa, ya que cuando era creciente los cuernos apuntan para el otro lado....Ella en el sur, la veía en forma de," c", como era creciente.....No asistía a clase para aprender el nuevo idioma, se mantenía con las personas que hablaban su mismo idioma y tenían más o menos las mismas costumbres. Asimismo los términos cambiaban de un país a otro, su significado....Se sucedían anécdotas muy risueñas, ya que  darle la cola para un venezolano, es darle un aventón, y para otro sudamericano, ya era algo más o menos que pornográfico....Conocía a algunos de sus vecinos y sabía, es decir, había aprendido que comprar y que no para elaborar una comida, adaptada al lugar. Sobre el idioma había aprendido lo esencial, lo más imprescindible para comunicarse.

Su vida no dejaba, de ser chata y monótona, salió a buscar trabajo y se dio cuenta que era imposible que tendría que asistir, a un aula para aprenderlo. Se relacionó, con otros compañeros, de otras nacionalidades. Los invitaba a su casa, para hacer la tarea domiciliaria, preparaba alfajores, de harina de maíz, que había aprendido a hacerlos desde niña...Logró tener un idioma aceptable, y cuando buscó nuevamente trabajo, la contrataron en una zapatería. Ella conocía de ventas y tenía un trato muy agradable, que le gana la confianza al dueño de la zapatería, que abría y cerraba el negocio. Ella era de pequeña complexión, y una visión un poco naíf de la vida , que le llamaba la atención. Cuando todo el mundo corría, ella se tomaba sus tiempos, para sonreir, y ser dulce y delicada. No era un personaje, ya que su relacionamiento era auténtico, cuando no entendía algo preguntaba de forma humilde, que le explicaran. Se dirigía al depósito, a buscar cuales eran los adecuados, para cada cliente, que entraba a la zapatería. Quizás interpretaba, a falta de idioma, que era lo que estaban buscando .Era observadora, si el que entraba llamaba mucho la atención, con sus ropas seguramente también, lo haría a la hora de elegir sus zapatos.

Si entraba alguien para hacer un regalo, disponía de todo el tiempo del mundo, para que el regalo fuera el adecuado. Eran talentos , que el dueño se dio cuenta que ella los tenía naturalmente.

Mientras tanto en su casa, comenzaron a quejarse de que la veían menos y que las cosas no estaban listas, como antes- Mas Sylvia, llegaba cansada a su casa, muchas horas de pie, y luego para regresar, el autobus.

Era un cansancio agradable, porque se sentía útil , ella siempre había trabajado en su país natal ....

Comprendió que no era tan malo haberse ido de su país, cuando tenía relaciones complicadas, mentalmente, tarareaba alguna canción o bolero..En vez de discutir, con su interlocutor, la mente la llevaba a otro lugar,cuando se aburrían, de discutir solo. Porque a todos le daba la razón, con la cabeza, asentía, a veces solo una mueca, con una leve sonrisa...Encontró una nueva meta en su vida, que era en su licencia laboral, iría a ver a su familia y amigos, Por lo que destinó parte de su salario, a ahorrarlo. Por más que recibía, el salario mínimo, este, la llevaría a pagar a crédito,el viaje. Estar de a ratos con sus afectos. Su marido e hijos, quedaban bien en el nuevo país, y ella aprendió a convivir con sus amigos de aquí y de allá....Su madre, contenta cuando llegaba, se divertían mucho juntas, saliendo al cine y al teatro en su idioma....