Te vuelvo a ver,
querida mariposa,
y me emociono.
Sentía tanto
tu ausencia y tu silencio
que estaba triste.
Ahora estás cerca
y vuelves, nuevamente,
con tu sonrisa.
Es lo que quiero,
saber que estás alegre,
vivir tu vuelo.
Y contemplar
los giros de tus alas
y sus colores.
No me abandones,
preciso de tu encanto
y tus caricias.
Estabas lejos,
ausente de mi vida,
y te extrañaba.
Fuiste la estrella
que un día guió mis pasos
entre las brumas.
Y conseguimos
soñar como dos niños
con los poemas.
En esos sueños
volamos a la infancia,
mi mariposa.
Por eso quiero
volver hasta esos versos
y compartirlos.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/06/22
- Autor: Pyck05 ( Offline)
- Publicado: 28 de junio de 2022 a las 06:44
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 40
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., Texi
Comentarios1
Hermoso poema que me llevó a los tiempos de mi niñez en que perseguía las mariposas.Saludos poeta, hermosos recuerdos.
Gracias Raiza, me alegro de lo que dices.
Un abrazo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.