Guardo días inhóspitos en un archivador,
Son tantos.
Guardo noches solitarias en una caja fuerte,
Son tantas.
Era agradable el olor de la tinta y el ruido
Germánico de la Heidelberg amenizando
Mañanas sin tardes y tardes sin ocaso,
como papel de celofán y labios perdidos.
No importaba el amor, sufría como peces de feria,
Y el brillar de tu mirada era un atisbo cruel de perdida
Futura, como aquella canción sin nombre.
Después vino la guerra y me rompí por dentro,
Me descuadre como un chasis sin remedio,
Pero tengo tantas tardes que olvidar,
Que soy tan olvidado por mí
Como una botella verde de Mateo en La Ribera,
Como los tres galeones encallados,
Que fueron muriendo a paso de vida y pubertad.
Busque fósiles de mí en las dunas relativas,
Ecuaciones de arena y tú resbalando desde el cielo.
Me alce como un tigre, sucumbí como una gacela
Y rompí las madrugadas con una desazón infinita,
Fueron tantas.
Soy agua, desasosiego y tristeza,
Mi razón de vida es caminar boca abajo en una tapia con cristales
Y envolver los vallados en papel Albal, evitar peligros.
Son tantos...
Paco José González
- Autor: Paco Jose Gonzalez ( Offline)
- Publicado: 1 de julio de 2022 a las 07:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 100
- Usuarios favoritos de este poema: Ben-., BUSTILLOS, Rafael Escobar, alicia perez hernandez, David Arthur, mariapdfoxa, Hugo Emilio Ocanto
Comentarios5
Otra de tu pluma que eleva al extasis....genial como poeta.....
Mil gracias, Leonardo.
Tienes frases muy buenas que llevan a la reflexión.
Tu escrito es brillante.
Saludos afectuosos
Carmen
Muchas gracias, Carmen,
Hoy, sin temor a equivocarme, puedo agregarte a mi lista de los poetas simbolistas que tanto me ha fascinado leer, como Paúl Valery, Stéphane Mallarmé, Arthur Rimbaud y Charles Baudelaire.
Has hecho un poema que tales genios te hubieran aplaudido y admirado.
Mi felicitación y admiración te llegan con mi fraternal abrazo y sincero afecto.
Aun considerandolas excesivas me llena de alegría tus palabras, estimado POETA GRANDE.
Abrazos.
Después vino la guerra y me rompí por dentro,
Me descuadre como un chasis sin remedio,
Pero tengo tantas tardes que olvidar,
Que soy tan olvidado por mí
......................
La guerra es diaria y es con uno mismo, el olvido y la tristeza son parte del ser, viene con las indicaciones para vivir, pero poco ponemos cuidado a esto. Grandeza de bellos versos en los que me deleito en leer.
Abrazos amigo Paco José
Mil gracias, Alicia.
Abrazos.
Tu gran talento siempre predomina en todo lo que tú compones, poeta.
Reflexivas y maravillosas letras, con el más grato placer de leer.
Saludos.
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