Qué cortarme ya nada

Qué cortarme ya nada;

de eso hablo frecuentemente además,

que es muy tarde pero yo a esto no sé escapar

aparte el que cambio se hizo momentáneamente difícil 

que es para tanto...

Me escudo de ti en mis sílabas grandes 

hasta colmar esa lágrima en la magia mía

o artificio tú sabrás que es más cosa tuya

el avance muy rápido aquí. 

Desde infinitos saluda con un colgante en la mano

y no, no disimules esa actitud de en marcha adelante... 

En resistencias muy lúgubres entre calambres y dudas

drogarte con esencias naturales

hasta el mismo cristal olvidársete

en reflejo de ignífugo ya no que humeante

con vuelta al lugar de la pena de uno, 

donde entra en consideración 

lo que esfumarse quiso hecho blanco

en la espuma amaneciendo los lunes

ningunos que duren brevísimos 

bien cerrado elegante el dibujo en salud siempre turbia

y noches y noches que no pasen los días despues

de esto duro sería no sé... Me figuro

incontables memorias azules, 

que atravieso mis curas con poder mío incluso

mientras se encienda una luz a lo lejos 

señal que lo sueño seguro.