…Y no te molestes
en cerrar la puerta,
déjala entornada
que así se ventile
esta casa nuestra,
déjala entreabierta
y no des portazos
ni esparzas la mierda
que has “pisao” en la calle
corriendo tras ella.
Y no es que me duela
saber que mentiste,
que eres un cobarde
lo sé desde siempre.
¿Lo que más me duele?
Que llegué a creerte
que llegué a engañarme
que llegué a quererte.
Baja la escalera,
bájala de un salto,
como si en tu sombra
aullaran los diablos,
rómpete los cuernos
contra los peldaños,
como si mi odio
te mordiera el cuello.
Márchate y no vuelvas,
porque hoy he borrado
con vitriolo puro
la pez de tus labios
y he bañado en sosa
mi sexo exfoliado
por la podredumbre
de tu semen rancio.
He de hundir mi cuerpo
desnudo en la arena
y romper el huevo
que incuba mi pena,
como mariposa
de su oruga presa,
y extender mis alas
a una vida nueva.
Shemirramis
- Autor: Jose Luis Posa Lozano ( Offline)
- Publicado: 13 de julio de 2022 a las 10:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 18
- Usuarios favoritos de este poema: José Domingo
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