Mi Otra Mitad

Pedro Abarca

Durante un largo tiempo,

caminé de la mano con el viento,

creyendo ser el cien por ciento,

sumergido en miseria y lamentos.

 

 

Creí tener las cosas claras,

pensé haber explorado bien el mundo

y haber visto todos los rostros y caras,

creí conocer hasta lo mas profundo.

 

 

Fue entonces cuando tú apareciste

y cambiaste todo a mi alrededor,

me di cuenta de que mi vida era triste

y estar contigo me hacía ser mejor.

 

 

Te esperé como no tienes idea,

día y noche anhelando por fin tenerte,

luego apareciste de repente,

y en mi corazón te quedaste permanente.

 

 

Contigo conocí el amor que tanto añoraba,
ese que describía en todas mis letras,
ese amor al que le dediqué poemas aunque no sabía quien era.

 


Abrí tu libro infinito de caricias,
dormí en tus brazos y se me iluminó la vida,
me salvaste de mí como ni yo mismo lo haría,
y guardé en mi alma nuestros recuerdos de cada día.

 

 

Tú has sido el más grande de mis aciertos,

la estrella más bonita que me regaló el cielo,

y aunque nuestro futuro es muy incierto,

viviré esta fantasía como si soñara despierto.

 

 

He aquí donde me doy cuenta,

que del cien por ciento yo era el cincuenta,

que tú eras la mitad que me faltaba,

que eres tú el único que me completaba.

 

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