Se ven palomas
buscando por el parque
unas migajas
de los ancianos
que vienen por las tardes
hasta su lado.
con unos restos
de pan y de comida
para entregarles.
Se ven gaviotas
vagando por el puerto
tras la carnada.
Restos del cebo
que pone el marinero
en los anzuelos.
Así se calman
y sacian apetitos
tan delicados.
Se ven mendigos
pidiendo en las esquinas
de muchas calles.
Eso era antes,
te dicen los "finolis",
ya no se pide.
Y es que el orgullo
oculta muchas manos
que lo precisan.
Se ven las lágrimas
de un mundo que agoniza
sin darse cuenta.
Rafael Sánchez Ortega ©
22/08/22
Comentarios3
Duro, muy duro apreciado Rafael.
Saludos desde Colombia.
Gracias Magnolia.
Saludos desde España.
¡¡BRAVO!!
Mientras existan poetas, la vida continuará teniendo sentido.
Shalom desde Israel, colega de la pluma
Gracias Brom Beto.
Un saludo desde España.
Así es como lo describes da tristeza pero tu poema le da aceptación , saludos
Gracias Violeta, es una realidad muy triste, es cierto.
Un saludo.
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