Un terrorífico día rodeado de amigos.
Tengo miedo, me encuentro en una situación peligrosa.
Hay monstruos a mi alrededor, y de todos, ella es la más poderosa.
La que más temor genera en mí…
La que hará que mi corazón se pudra hasta el fin.
Le tengo miedo, así que no me acercaré.
Aunque se encuentre cerca mío poco caso le haré.
Quizá se me acerque y me hable, y así en la tentación caeré.
Pero poco efecto tendrá, pues por mi miedo no reaccionaré.
La parada está cada vez más próxima, y ese sentimiento de mi corazón se apodera.
"¿Alguien me hablará? ¿Estaré haciendo algo mal? ¿Y si llega a doblar?" mi mente no lo tolera…
Quiero ser fuerte y valiente de mil maneras.
Sé que al final, todo esto no es más que una prueba.
Aquellos seres por alguna razón hablan conmigo…
Son amables y no me dan ningún castigo.
Son monstruos, sin embargo no me hacen daño.
¿Dejar de tenerles miedo dará el mejor resultado?
Me asfixio con la llegada de más.
No me dejan respirar, es un no parar.
¿Tal vez mi pelo deba cortar?
Lágrimas por aquí, lágrimas por allá.
La noche ha llegado, al acostarme en mi cama siento que me pude salvar.
Salvar de los tormentos de aquel cementerio llamado "Sociedad".
Pensando y pensando, "Esto lo debí hacer así" "Esto lo debí hacer asá"
¡Esto es una pesadilla! ¡Mañana no quiero despertar!
-CDD
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Autor:
UnIntentoDePoeta (
Offline) - Publicado: 4 de septiembre de 2022 a las 23:31
- Comentario del autor sobre el poema: Una mañana desperté con un sudor frío en mi frente, sabía lo que significaba, debía salir de casa y adentrarme en el cementerio. ¿Qué es más aterrador que una ciudad llena de zombies y monstruos?
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: Alfredo Daniel Lopez
Offline)
Comentarios1
Tienes razón que a veces la sociedad, el mundo que nos rodea es un cementerio en el cual no queremos estar... pero vivimos en el mundo y de el no podemos escapar, tan solo asumir que en sus extrañas de maldad no queremos habitar.
Un abrazo fuerte compañero de letras.
Gracias por comentar!
La realidad es que la mayoría de las veces sentimos miedo de este cementerio lleno de caminantes, y aunque coincido en que debemos afrontar la realidad y aceptar que no podemos escapar, creo que debemos quitarnos la máscara de "Víctima de los acechantes monstruos" para mostrarles la verdad. Nosotros también somos monstruos.
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