Déjame decirle Dios lo que en el alma siento
Déjame decirle en versos dulces cuánto la adoro
Que mis palabras sonadas en armonías de oro
Despierte en su ser un febril sentimiento.
Yo no vivo Señor si ella se aleja
Si el destino de mi lado la arrebata
En mis pensamientos siempre se refleja
Su recuerdo bello sin querer me mata.
Ansío de besos colmar su piel
Estrecharla en mis brazos vigorosos
De sus labios dulces probar su miel
De su límpida humedad gozar dichoso.
¡¡ Ella es hermosa Señor!!
Hermosa como tus ángeles del cielo
¿Del cielo la enviaste Tú mi Dios?
Porque ella es luz, es dicha, es mi desvelo.
Sus ojos destellan en demasía furor
Su sonrisa desprenden melodías ignotas
Al mirarla mi rostro se enciende de amor
Al oírla reviven mis ilusiones rotas.
Dios, si en tu verbo no existen errores
Si lo imposible no es parte de ti
Cuando juntes destinos de corazones
Por un instante Señor...
¡Acuérdate de mí!.
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Autor:
El Amante Solitario (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de septiembre de 2022 a las 00:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 56
Offline)
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