Lejos de ti los bufidos aquiescentes
de una juventud maltrecha, eliges
sin embargo, una senda empedrada
de silencios. Es que la vida se te va,
inundando de lágrimas, los libros que
tanto te marcaron. Y aunque de menos
eches, la presencia de tal o cual persona,
son ellos, los que forjaron el devenir peculiar
de tu existencia. No quedarán pues, en vano,
tantos minutos dedicados a ese ejercicio valioso,
pues en ellos fue tu llanto y tu identidad.
Literaturas de circunstancias, de viajes,
de íntimos naufragios, de bromas pesadas,
de mal gusto; libros de filosofías, de arabescos
taciturnos, leídos en bares o en cafeterías
de la periferia, entre sus páginas escuchaste
el sonido esencial que a ti llegaba. Que, como
gaviotas oscuras, de ti y de tus horas, participaron.
Luego, cuando ya nada quede, y se haya oscurecido
el último crepúsculo, arderán en cambio
esas horas, como últimos penachos de tus ojos
incendiarios-.
©
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Autor:
Ben-. (
Offline) - Publicado: 24 de septiembre de 2022 a las 00:40
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: Aitor Duarte Fernández 🏔️❄️⛏️, SOY.-, Alexandra L, alicia perez hernandez
Offline)
Comentarios3
bellas letras poeta , asi suele pasar cuando uno lee, gracias por compartir
entre sus páginas escuchaste
el sonido esencial que a ti llegaba. Que, como
gaviotas oscuras, de ti y de tus horas, participaron.
Luego, cuando ya nada quede, y se haya oscurecido
el último crepúsculo
besos besos
MISHA
lg
Muchas gracias Misha, un saludo cordial!!
Me encanta Ben. Un vocabulario muy dominado. Felicidades amigo. Fuerte abrazo. Paz. 🤗🤗
Encantado de que te guste tanto, un abrazo compañero en letras y mi gratitud!!
Si como comenta Aitor un gran repertorio el que dominas a la perfección.
Un abrazo amigo Ben-.
Me alegra que te gustara, un abrazo y gracias Antonio!!
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