Me dieron a elegir un día en Marbella
con liras de color, muy tiernos encantos;
la orla de una rosa y emblemas magantos,
la risa y la flauta de toda doncella.
Pues, también habían dardos y mastrantos
con un solo dolor de memorable huella,
y vi que entre todos me observó una estrella:
«la niña del cielo... sus grandes amiantos».
Y viendo la apuesta del roble y el bledo,
yo, secretamente me distraje todo,
que dejé a un lado lo patán del lodo.
Así, yo bien dije: «¡la verdad no puedo!,
pero viendo musas, con ella me quedo,
para descifrarle su divino modo».
Dux Den
- Autor: Dux Den (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de octubre de 2022 a las 08:35
- Comentario del autor sobre el poema: Fue una bonita experiencia. Gracias Marbella por todo. Buenos días amigos (as). Dios los bendiga.
- Categoría: Cuento
- Lecturas: 50
- Usuarios favoritos de este poema: Dux Den, Daario, Antonio Miguel Reyes, Lucía Gómez, Intensity ✍️, alicia perez hernandez, Ed-win
Comentarios3
Marbella no es la más bella
pero es guapa toda ella.
Un abrazo
bello cuento poeta , buena eleccion gracias por compartir
Así, yo bien dije: «¡la verdad no puedo!,
pero viendo musas, con ella me quedo,
para descifrarle su divino modo».
besos besos
MISHA
lg
Bellos versos, un fuerte abrazo
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