En la ventana ya no hay lontananza,
sólo una oscuridad que inspira calma,
con sortilegios embriagando el alma
y llenando su seno de añoranza.
Afuera, el viento, en suave melodía
orquesta la macabra oscura danza,
los árboles aviando en alabanza
a la luna, radiante en lozanía
Las alturas recorre, peregrina,
la luna pálida como una diosa;
mirando nuestras vidas, silenciosa;
riéndose a oscuras de nuestra rutina.
Antes que llegue el resplandor temprano
la reina albina piensa en la ironía:
su reinado fenece con el día,
y en él se pierde su esplendor lozano.
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Autor:
David Ortiz Ramírez (
Offline) - Publicado: 25 de octubre de 2022 a las 22:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: Tommy Duque, Antonio Miguel Reyes
Offline)
Comentarios2
Fina, fina pluma.
Gracias.
Bonitos cuartetos.
Un abrazo
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