Dadme tu espada de cortante filo
inextinguible flama de incandescente fuego
entregadme con sutil desmayo todas tus penas
y deja en mi tu escondido anhelo.
Huí temeroso al inhabitado yermo
alejándome de la ingratitud y el desconsuelo
bajo el zafir del sereno cielo.
¡ Oh vastedad de sueños !
rescoldos de hojas secas
piedra viva de mis empeños
que mi sentido obcecas.
En las ambarinas tardes angustiosas
cenizas turbias del olvido
denle la plenitud a mí alma ansiosa
que el infortunio cruel ha derruido.
Dadme,
un súbito momento de calma
a mi pobre soledad umbría
es una ciega luz que desalma
y a mis fuerzas oprimía.
Es una calle larga, angosta y solitaria,
sus orillas mudas piedras
de sombras negras brumosas
son espinosas hiedras.
Siento seas efímera ola
que en un instante nace y muere
barro frágil que se deshace
distante flor que no se abriere.
Siento desfallecer mis fuerzas
al comprender que no me ansías
y mi esperanza se desploma
cual misteriosas ordalías.
En el horizonte asoma
tu crepuscular mirada
y siento tu lejano aroma
en la niebla disipada.
Malco.
- Autor: MALCO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de octubre de 2022 a las 12:01
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 32
- Usuarios favoritos de este poema: Melissa 94, alicia perez hernandez
Comentarios6
tus letras llenas de melancolia , dulce versar poeta gracias por compartir
Dadme,
un súbito momento de calma
a mi pobre soledad umbría
es una ciega luz que desalma
y a mis fuerzas oprimía.
besos besos
MISHA
lg
Sin palabras... Me gustó 👏
Gracias Melisa, por tus palabras.
Un cordial saludo.
Gracias nuevamente Lista.
Un abrazo.
VERSOS INFINITAMENTE BELLOS
Gracias Alicia, por tus palabras.
Un abrazo.
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