Quién, quién fue,
con su mirada, resplandor
antiguo, de una voluta
admirada, voló por aquí,
por allá, hasta atraer
de nuevo, lo milagroso
de los jardines: el pozo,
el rumor del agua, la secreta
fuente. Yo veía su robustez.
De templo caído en mitad
de la tarde sin fuego. De repente,
no había prisas. Todo era
sostén divino de naturaleza intacta.
©
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Autor:
Ben-. (
Offline) - Publicado: 4 de diciembre de 2022 a las 00:02
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Freddy Kalvo, Alberto Diago, El Hombre de la Rosa, Alexandra L, David Arthur
Offline)
Comentarios1
bellas letras llenas de naturaleza poeta
gracias por compartir
la secreta
fuente. Yo veía su robustez.
De templo caído en mitad
de la tarde sin fuego. De repente,
no había prisas. Todo era
sostén divino de naturaleza intacta.
bsos besos
MISHA
lg
Gracias a ti, Misha, un saludo!!
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