Entraste en mí,
sin permiso,
como ola marina
empujada por un aire necio
hasta el fondo de mis huesos.
Entraste en mí,
sin licencia,
como rayo de sol quemando
mi piel marrón
volviéndola ceniza.
Entraste en mí,
sin visado,
como estrella protectora
de mi sombra
con tus brillos pardos.
Entraste en mí,
sin autorización,
como cómplice lunar
de mi espacio
preservado.
Entraste en mí,
de día o de noche
y te quedaste
hasta la muerte
en mi alma
y en mi mente.
- Autor: Jerry Méndez (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de diciembre de 2022 a las 17:19
- Comentario del autor sobre el poema: El amor es el bien de la humanidad... hay que buscarlo.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Freddy Kalvo
Comentarios3
Siempre es un gusto disfrutar de la lectura de tus bellos versos.
saludos poeta
El gusto es para mí. Un placer que te agraden mis letras.
Feliz sábado.
Si ella penetró profundo
y con su alma enamorada
¡Qué dicha si es deseada,
como aroma de otro mundo!
Mira tú, el amor fecundo,
que ha cosechado en tu mente
con el corazón ardiente
aunque sea sin permiso
pero tu alma da un aviso
¡con ternura fehaciente!
Hermosos versos Jerry.
Un abrazo fraterno. Ahí te dejé como obequio a tus versos una paráfrasis en una décima espinela.
Es un gusto recibir tu décima, me encantó.
Mi estimado amigo, no cabe duda que quien tiene "felling" lo demás le llega solo.
Felicidades y nuevamente gracias.
Un abrazo, poeta, escribes muy bien, mis aplausos
Mi estimado colega aagradezco mucho tu fino comentario.
Recibe un fraternal abrazo desde la Ciudad de México.
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