DESDE EL DIA EN QUE TE CONOCI,
DULCE PALOMA,
MI ALMA Y MI SER,
NO HAN DEJADO DE AMARTE.
DESDE EL AMANECER,
HASTA EL OCASO TREMULO,
OSCURO Y TIRITANTE,
DE LA NOCHE.
PORQUE AUN,
EN LA MAS GRANDE
E INFINITA OSCURIDAD,
YO PUEDO AMARTE.
SOLO SE, QUE NO HABRA,
NI DISTANCIA,
NI TIEMPO,
QUE NOS SEPAREN.
SOLO DIOS Y LA MUERTE,
PODRAN HACERLO,
MAS AUN ASI,
SIEMPRE TE AMARE.
MAURI
- Autor: MAURI (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de septiembre de 2010 a las 12:13
- Categoría: Amor
- Lecturas: 162
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.