Con tu silueta dorada,
te asomas al horizonte,
brillando a través del monte
candores de la alborada,
y entonan de madrugada
las aves su hermoso canto.
Y el resplandor de tu manto
Inunda con su armonía,
preludios de un nuevo día
Amor, belleza y encanto.
Saeta sol que recorres,
el cielo como palomas,
entre montañas y lomas
vas bendiciendo las flores
perfume que en tus albores
recogen las mariposas.
Malvas, espinas y rosas
aplauden tu nacimiento,
y vuela feliz el viento
cuando en la tarde reposas.
Bendito sol que abrigaste
del frío al desamparado,
cómo fogón que a su lado
férvido y fiel te quedaste.
Un día orgulloso volaste
bordado en una bandera.
Y el cielo que te venera
se viste con tus reflejos.
Gigante tizón que a lo lejos,
das vida a la primavera.
©Autor :
Carlos Roberto Reyes Paz.
Choluteca, Honduras.
- Autor: (Calichán ROMÉ) (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de diciembre de 2022 a las 02:16
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 23
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Mauro Enrique Lopez Z., Antonio Miguel Reyes, alicia perez hernandez, Carlos Roberto Reyes Paz
Comentarios2
Bonitas espinelas, un placer leerlas
Un abrazo
Gracias mi admirable amigo Antonio.
Reciba un abrazo fuerte, deseando redundantes éxitos en su vida.
Bendito sol que abrigaste
del frío al desamparado,
cómo fogón que a su lado
férvido y fiel te quedaste.
Un día orgulloso volaste
bordado en una bandera.
Y el cielo que te venera
se viste con tus reflejos.
Gigante tizón que a lo lejos,
das vida a la primavera.
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Ups! Cuanta belleza junta en estos RESPLANDORES que dejan tus bellos veros, de principio a fin resplandece el sol, primavera, gaviotas y horizontes que se aprecian en tu arte de hacer poesía.
saludos poeta
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