**~Novela Corta - Miedo Intenso - Parte I~**

Gabriel, un joven soñador comienza a laborar en la fábrica rural en la confección de panes. El joven Gabriel se decide mudar porque en realidad queda más cerca ese nuevo hogar de su nuevo trabajo. Gabriel decide ser el panadero de la fábrica rural cuando se perfila en el desastre de creer en que la vida queda a la deriva sin poder trabajar. Gabriel desea ser el mejor panadero de la región rural cuando en el trabajo existe mucha competencia. Gabriel cree en ser el mejor y perfecto panadero rural, pero, se intensifica su insistencia cuando conoce a Margarita. Margarita es una joven muy hermosa cuando en sus ojos siente ver al mar profundo y escapar del solo pensamiento no se le puede dar. Gabriel en una mañana antes de salir a trabajar conoce a Margarita. Margarita cree en poder enamorar a Gabriel, pero, queda inconscientemente malherida por el amor de Gabriel. Cuando en el afán de dar una oportunidad al amor fue como un terrible amor pasional y candente como poder ser a ciencia cierta como poder ser inconsecuente enamorada de Gabriel. Esa mañana fría y álgida como bruma en medio del mar y así es que Gabriel conoce a Margarita, una muchacha joven, hermosa y de unos ojos sorprendentemente azules como el mismo mar que atraviesa a su propio instinto. Cuando en el mismo instante de esa mañana se converge en el alma una sola insistencia de creer en el amor sin heridas ni compasiones. Si en el alma de Gabriel se electrizó de fiebres nocturnas desde esa mañana en que conoce a Margarita y deseando amar quedó el joven prendido de amor como deseando ofrecer una rosa a ese amor. Cuando en el alma de Gabriel se electrizó la forma de creer en el alma sucumbiendo en un trance total. Y amando Gabriel quedó tan enamorado de Margarita cuando se intensifica el amor que se guarda en el corazón. Y con total razón se pierde el destino frío de sentir amor como el calor en el corazón. Y Gabriel en la espera de ese amor interpela y se convierte en un buen panadero de la fábrica de panes del pueblo rural. Y como en el mismo trance perfecto se vio el mismo destino fulgurante de emociones buenas. Y Gabriel enamorado de Margarita si la conoce una mañana al salir de su hogar hacia el trabajo, la ve y la observa fuera de su propio hogar. La joven lo mira y lo observa atentamente como un amor imperioso, clandestino y sosegado dentro del paisaje frío de esa mañana. Cuando en el tiempo se electrizó la manera de creer en el alma y fugazmente se sintió como tan veloz es el momento en que se conocen tanto Gabriel como Margarita. La pareja Gabriel y Margarita se sienten como dos jovencitos en plena pubertad cuando el amor llega y florece dentro de sus corazones. Margarita que es tan joven y hermosa solo quiere saber del verdadero amor, porque cuando en el tiempo ocurre el desenfreno de ver al corazón en tiempo y distancia se vio fríamente indeleble mortífera de amor por Gabriel. Cuando Gabriel siente amor hacia Margarita cuando observa esos ojos de mar sintiendo calor como un amor dentro del corazón. Si Gabriel siente un solo desafío en que palpita su corazón amando a Margarita. Esa mañana fue felizmente un panadero y elaboró más de cien panes al día sólo pensando en el encuentro con Margarita. El encuentro se dio cuando se presentó Gabriel ante Margarita buscando un sólo amor en el alma y en el corazón amando como nunca a Margarita. Cuando Gabriel amó sin destino y con miras en poder amar a ésa mujer que acaba de conocer en la mañana antes de ir a trabajar. Cuando apenas se sentía el frío de la mañana, Gabriel y Margarita sienten un calor fantástico en su corazón amando como nunca a esos ojos de mar. Cuando en un instante se siente como tan frío el rocío de la mañana como lluvia en frenesí. Porque en el instante de la mañana se aferra al destino frío de un sólo tiempo es como la poca lluvia que cae entre los ojos de ambos. Y la tierra húmeda da un olor al rocío de la mañana y esperando a que el destino se aterre de un fuerte abrazo entre ambos jóvenes sintiendo el coraje de amar. El alma de Gabriel siente un fuerte empujón hacia los ojos de la muchacha, y Gabriel se aferra al destino en creer en la intensidad de ese amor. Porque en el camino se siente como una sola verdad en que el amor ha llegado a los brazos de Gabriel en ese hogar en el pueblo rural. Cuando se intensifica la comarca y la comitiva de ir y venir hacia la fábrica rural donde Gabriel es panadero. Y como un altercado frío y descendente se vio indeleble entre la cara de Margarita y el rostro de Gabriel. En esa mañana fría se vio como trascendental el frío de la mañana cuando apenas se conocen Gabriel y Margarita. Cuando el tiempo pasa como desapercibida la apariencia y el amor como insistente es el coraje de amar fugazmente en el delirio sosegado de un tiempo en que se gana un amor en el tiempo y más en la osadía de encontrar un amor. Tanto Gabriel y Margarita se enamoran perdidamente en el instante en que se conocen como un momento en que se obtiene amor y no solo el tiempo en el corazón. Cuando el instinto se aterra en esa fría mañana cuando apenas se conocen Gabriel y Margarita. Si en el instante de esa mañana se enamoró queriendo derribar el corazón en un sólo desafío amando como nunca. Y Gabriel amando a Margarita quedó como la flor llamada margarita y como un capullo quedó prendido de ella. Margarita entre las flores miró a los ojos de Gabriel y sintiendo la suave brisa quedó sin prisa al ir a su trabajo como panadero. Margarita se presenta como la flor margarita como abrir un capullo, y si fue más su eterno amor. Cuando en la frontera fue como la idea macabra de una verja por delante de ambos jóvenes, porque cuando Margarita se presenta como Margarita ante el joven Gabriel. Y esos ojos de mar entre ambos se derramó el cielo y el mar también, al igual que dentro de su pecho y más en el corazón se ha derramado todo el amor. Si cuando en el tiempo y más en esa feliz mañana se ha cumplido todo en derredor, cuando en el alma se ha intensificado lo que más se siente en el alma a todo un amor entre ambos jóvenes. Si, Gabriel y Margarita, cuando en el alma y más en el corazón se electrizó la forma en caer alrededor del tiempo y más como un juego de amor en la senda rural entre dos campos de corazones abiertos amando como nunca. Cuando el alma de Gabriel fue como un desierto de magia trascendental en el día bueno en elaborar panes en la panadería en la fábrica de panes en el área rural. Cuando el alma de Margarita despierta de un letargo frío, desolado, y tan muerto como ser un eterno espanto nocturno, y sí, que ella lo sabe que es una muerta de dos décadas, pero, prefiere callar lo que calla el silencio, la vil muerte entre dos corazones que se aman con demasiada velocidad. Cuando el alma de Margarita se intensificó como la gran osadía de creer en el corazón destrozando el alma detrás de una vil patraña de la vil muerte. Si el alma gana una sola verdad, como la insistencia florecida en margaritas de un área rural como lo es el campo, si, allí se conocen tanto Gabriel y Margarita. Esa mañana de esporádica lluvia fue que surge el amor entre Gabriel y Margarita llevando en su corazón una rica sensación como fue encontrar el amor entre verjas que interponen el amor entre ambos jóvenes. Esa mañana de rocío en tierra húmeda se intensificó el amor, pero, Margarita sabiendo que es un fantasma de hace dos décadas cuando muere al suicidarse su cuerpo por otro amor. Margarita es un fantasma celeste, como un ángel y con una hermosa aura. Cuando en el alma de Gabriel se aferra al amor por conocer a Margarita, la joven intenta ser percibida por el joven cuando en el altercado fue como una brisa que roza a su piel como ese rocío de la mañana en que ambos tratan de conocerse. Margarita como la flor margarita se siente como una flor prendida y un capullo por abrir. Tanto Margarita y Gabriel se conocen entre sí, cuando en el embate de la vida, del amor y de la pasión bifurca la muerte como un vil fantasma. Cuando en el tiempo y más en esa mañana se encrudece el amor en tiempos sin soledad cuando se conocen los jóvenes. Y como un sólo tiempo en buen uso del amor y de la pasión cuando se conocen en el mismo tiempo en que la mañana posee rocío de la mañana con poca lluvia entre esos dos ojos como mares encontrados. Ambos jóvenes se miran y se observan desde sus adentros buscando amar al destrozar la vil muerte como un cruel fantasma que era Margarita. Cuando en esa mañana acaba como un terrible amor desde su propio corazón cuando en el altercado se aferra a un mal desconcierto en ser solamente un fantasma. Cuando en el instinto se siente como los ojos atrayendo como imán a los mares perdidos. Los ojos de ambos jóvenes y como el azul del mar se juntan como unir a dos corazones en un sólo cuerpo. La luz que emana entre ambos jóvenes dicta que se enamoran dejando un sólo altercado entre los ojos enamorados. La vida de Gabriel fue fantástica y muy fructífera desde que observa a esos ojos con luz de mar abierto dejando saber que el instante cuando se conocen abre un buen camino y fue el camino de elaborar panes en la fábrica del pueblo rural donde comienza a elaborar Gabriel. El amor perfila hacia un desenfreno mortal de amar bajo la luz del sol como una lluvia esporádica sintiendo el amor en los corazones de los jóvenes. Cada uno después de presentarse y de conocerse se disponen cada uno a realizar sus faenas diarias dejando inmortal el corazón con el amor. Y sin poder dejar el alma en frascos de una terrible soledad sino que hallan tanto Gabriel y Margarita al amor. Y recorrer el tiempo fue su mayor dolor porque el amor es como el dolor en el alma y sentir el desenfreno fugaz de un sólo corazón amando como nunca. Gabriel tiene un buen día en laborar como panadero cuando en su labor se aterra en saber de su cometido sin frenar al destino. El destino de Gabriel se nota reflejado en el altercado frío y descendente de creer en el ocaso impertinente cuando va rumbo a su nuevo hogar en el pueblo rural. La vida de Gabriel se ve impaciente en ese ocaso por llegar con felicidad hacia su hogar con la espera de ver a Margarita. La vida de Margarita se siente atraída por la vida de Gabriel y ella quiere salir de ese hogar para poder verse con Gabriel, pero, ella sólo es un fantasma en que sólo se ve cuando sale el rocío en la mañana dando suerte al día como siendo panadero Gabriel. Solamente Margarita se ve entre el rocío de la mañana porque es un fantasma de hace dos décadas. La vida de Margarita se siente impasible, intransigente, delicada, pero, temerosa de pasar esa noche después del ocaso para poder por la mañana salir con ese rocío de la mañana y tierra húmeda y con esa lluvia esporádica entre los ojos de mar de ambos jóvenes. Esa noche fue terriblemente dura, inestable, atrayente y desafiante cuando Gabriel sueña con el amor de ésa mujer llamada Margarita sin saber ni sospechar que es un fantasma de hace dos décadas cuando en el altercado frío e indeleble se ve y se siente como atraído por el amor de Margarita. Cuando en el mismo instante se ve aterrado hacia el mismo amor de Margarita. Y como un silencio aterrador se enfrasca en amor Gabriel de Margarita. Gabriel durante esa noche sueña con el amor de Margarita cuando en el afán de ver a su insistente corazón enamorado de Margarita cuando en el momento cae rendido ante tanta belleza como lo es la hermosura de Margarita. Y como una reyerta entre mente y corazón se debate una insistencia por conocer mejor a ésa mujer llamada Margarita y esperando a que el destino fuera distinto se aterra Gabriel sin saber ni sospechar de que el alma de Margarita fuera de su corazón. Y sintiendo un suave delirio se ve Gabriel de Margarita cuando se siente como impasible el tormento de creer de que la vida cambia de bien a mal o de mal a bien. Gabriel se siente preocupado, desconsolado e inestable con el amor de Margarita que no la pudo ver en el ocaso cuando sale y llega a su nuevo hogar. Mientras que Gabriel en el atrio se dispone a sacar sus pertenencias en cajas al mudarse a ese nuevo hogar. Gabriel se fija que existen cosas de mujer en ese atrio las toma y las desecha. Cuando en un instante no se da cuenta de que existe una mujer en ese nuevo hogar. La vida de Gabriel se disuelve en toda esa noche pensando, imaginando y fraguando como poder ser el amor de ésa mujer. Porque Gabriel en el embate de creer en el alma se siente como desapercibido el instante cuando se sabe que el amor no es pasajero sino muy insistente en el corazón de Gabriel. Cuando en esa noche se siente como un silencio aterrador, un sueño indeleble y un amor sin destino, aún. Cuando Gabriel se aferra al sueño pertinaz de un encuentro en que sólo vio a ésa mujer en la mañana como un rocío de la mañana. Si ella siempre se ve en la mañana como un vil fantasma, pero, se siente como una mujer jovial y como un corazón enamorado amando como nunca. Cuando Gabriel se aferra al instinto de ser un hombre tan enamorado, pero, sin poder creer que el amor no le corresponde. Y en esa noche se aferra al instante en que Gabriel sueña un sueño tan profundo, hondo y tan real como poder ser sin ser a ciencia cierta. La paz de Gabriel se siente atormentada, impasible y como un torrente sanguíneo que corre por sus venas sintiendo el coraje de sentir el amor en su cuerpo y en su corazón. La vida de Gabriel se siente como un funesto altercado entre razón y el corazón buscando un sentir entre el amor y el sentido en sentir el corazón tan enamorado. Porque cuando en el instinto se vio aferrado al desafío incoloro de creer de que el invierno socavó en el frío de esa noche. Cuando Gabriel se siente atemorizado, pero, no espantado por el temor del amor en el corazón enamorado. Cuando es un infierno el instante en que se aferra Gabriel en esa fría noche. Y desnudando a su corazón se vio incongruente, sollozando en voz baja y temiendo al corazón enamorado de Margarita. Cuando en el tiempo y más en la noche se siente como una sola verdad en que se perfila el desierto imaginativo de Gabriel y amando a Margarita como nunca antes. Cuando en el embate de creer en el alma de Gabriel se vio desconsolado como amando un funesto instante cuando se enamoró perdidamente de Margarita. Cuando Gabriel en esa noche si fue solamente esa noche en que sueña perdidamente con el amor de Margarita. Y se aferra al desastre de creer que su amor va directamente al corazón de Margarita. Cuando Gabriel se inmiscuye en el amor de Margarita cuando en esa noche tan fría, álgida y gélida se siente como atroz el momento en que se gana un amor en el corazón. El corazón de Gabriel se adentra hacia un nuevo destino sucumbiendo en un trance directo como poder ser el enamorado de Margarita. Cuando en el momento se aterra el instante en que Gabriel se siente como un hombre capaz de amar lo que los hombres desean amar. Porque Margarita irrumpe en el buen destino de Gabriel, pero, sabiendo de que ella es sólo un fantasma que es una muerta de hace dos décadas. Cuando en el tiempo y en la cosecha del amor verdadero se aterra en ser como la fuerza inmóvil del corazón enamorado de Margarita y Gabriel se siente como deliberando a su alma de un instinto tan enamorado. Cuando se siente desapercibido, pero, cierto como una fuerza en espelunca, como la misma fortaleza en la misma alma perdida y enamorada de Margarita. Cuando Gabriel se aterra en poder salir de ese atrio donde guarda sus más indelebles sentimientos y se siente como un enamorado de la vida sin poder sentir la fuerza en debilidad. Cuando la fuerza en la vida y en el amor se siente como un instante en soledad, Gabriel siente que la vida cambia en soledad sin tener amor y sin saber de que el instante se cuece el tiempo y de un enamorado corazón. Cuando en el tiempo de Gabriel ocurre el transcurso de la noche sin poder sentir en su corazón el amor sólo se vio con un miedo intenso en quedar solo y sin amor. Gabriel pensó en ser como el mismo imperio sosegado y como el mismo corazón tan enamorado de Margarita. Y Margarita sin tiempo ni pasaje de ida porque realmente ella regresó del más allá cuando quiso suicidar a su corazón y quedó viva en el tiempo. Y Gabriel sin saber ni sospechar que en el transcurso de la noche la percepción queda en oír a su amor queriendo a ése otro amor. La vida de Margarita se siente como un dolor imperceptible, rencoroso y mal adecuado cuando Margarita desea amar a Gabriel, a pesar de que ella es un fantasma. Y Margarita cree que es imposible el amor hacia el joven que acaba de conocer. Margarita insiste en querer amar a ése joven cuando en el delirio sosegado se siente como un dolor fantasmagórico y como una observación intransigente de creer de que el amor viene y no se va como siendo un fantasma. La vida de Margarita es imperceptible al fuego devorador del amor quedando como cenizas heladas de un tiempo en que quiso amar a Margarita. Y Gabriel se siente en esa noche solo y sin amor alguno en su corazón, solamente pensando en el delirio de una aventura con Margarita. Margarita se aterra al ser un fantasma solitario, en soledad y sin consuelo desnudando a su corazón por amar, otra vez. Gabriel siente en el delirio un desafío y es conocer profundamente a ésa mujer, por la cual, Gabriel ama sin saber que es un fantasma de hace dos décadas al morir suicidando a su débil corazón por un amor. El amor de Margarita se vio intransigente, con dolor y herido porque en el frío de esa noche fue como un amor escondido y entre escombros de la verdad se vio delirante, candente y malherida como la verdad de que su insistencia se ve atormentada, pavorosa, horrorosa y temerosa de ser como el mismo amor. Cuando en el afán de sentir el silencio creyendo de que el atrio había fantasmas, pero, no, si en el instante vio cruzar un celaje creyendo que fuera un fantasma, pero, no, aún no. Y era Margarita la que cruza el atrio en busca de su propio amor y queriendo amar quedó el fantasma. Margarita sin saber que Gabriel se encuentra en el atrio se vio herida, dolorosa y mal intransigente cuando en su alma se identificó como un transparente fantasma, el cual, se enamora de Gabriel sin presentir de que Margarita es un fantasma inmortal. Cuando en el imperio de un instante se siente como un cruel fantasma, el cual, mira desde su propia voluntad queriendo volver a amar y era Margarita la que quiere amar a su amor llamado Gabriel. Cuando el altercado frío e indeleble de creer de que el fantasma llamada Margarita se vio aterrada de un espanto espeluznante si ocurre el deseo de ver al cielo seguro de una paz en el alma. Y como una verdad intransigente se siente como un sólo pasaje sin regreso como Margarita siendo un vil fantasma en que sólo desea amar a Gabriel. Cuando ocurre un sólo deseo en que el cielo se siente como un doble sentido en que el cielo se debate por una gran sorpresa. Y Margarita se siente como tan delicada de alma y de una pena insospechada de tiempo, de alma sin pena y de un ocaso en que no regresó jamás, pues, antes de esa noche en ese ocaso se vio inmortal como espantando el dolor en ser solamente un fantasma sin poder mirar ni observar a los ojos de Gabriel cuando Margarita se ve solamente en el rocío de la mañana. Y Margarita se sorprende al ver el instante en que el tiempo gana una batalla en soledad y en frío desenlace cuando realmente Margarita pierde la guerra de amar a Gabriel porque sólo es un fantasma. Margarita siente una suave y delicada piel queriendo amar a Gabriel, pero, es sólo un fantasma doloroso, decaído y triste, cuando en el tiempo y más en el ocaso se pierde el temor de ser como un verdadero humano para poder amar a Gabriel. Esa eterna noche se convierte en un doloroso dolor y con una mal inconsecuente idea en querer amar a Margarita se aferra a la ilusión de amar a ésa mujer, la cual, sólo conoce entre el rocío de la mañana cuando el tiempo caduca en la espera de ese amor. Gabriel sueña con amar a ésa mujer sin saber que es un fantasma. Cuando Margarita sólo siente en su destino una fuerza impetuosa si en el momento se aferra a amar a Gabriel como a su primer amor. Cuando sólo ocurre la fuerza en amar a Gabriel como a ése primer amor cuando Margarita intenta suicidarse quedando viva e inmortal. Si en el escaso momento se interpela como una piedad inmortal de amar a ése hombre que conoce Margarita en el rocío de la mañana y con lluvia esporádica. Porque en el trance y en el trayecto se perfila una mala osadía como un mal convenio en amar a ése hombre y todo porque Margarita es un fantasma. Y se siente como derribar el momento en que se gana un deleite frío e intransigente en querer amarrar el amor de un fantasma hacia un verdadero hombre.                                                           

Continuará……………………………………………………………………………………….

Toda Novela Corta: Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez 

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