Sé que un día habré muerto, estaré en una cama cubierto y ya no veré la luz. Alguien construirá una cruz para mi sepultura. Alguien mirará a las altura con los brazos abierto. Alguien dirá que es cierto, que por fin ya he partido. Alguien, aún confundido, balbuceará mi nombre. Dirá que ha muerto un hombre y abrazará a mis hijos. Alguien habrá de llorar al ver que me he ido. Alguien quedará afligido y alguien habrá de rezar. Alguien se acordará por siempre que le di un beso en la frente y un abrazo de amigo. Alguien dirá haber sido testigo de mi afán en la tierra. Alguien tomará una piedra y allí escribirá mi nombre. Rezará aquí yace un hombre que tuvo un buen corazón. Alguien con o sin razón dirá que un día me quiso. Alguien hará el sacrificio de construirme una cruz. Alguien encenderá una luz en mi última morada. Alguien se quedará allí parada con lágrimas en los ojos, que cubrirán sus anteojos y secará con papel. Alguien será uno de tantos que romperán en llanto y me rezará una plegaria. Alguien publicará en los diarios que terminó mi calvario y que ahora vivo en el cielo. Alguien rezará a diario, con un rosario en la mano hasta decir amén. Alguien, tal vez mi hermano, consolará a mi madre. Alguien dirá es mi padre ese quien está allí dormido. Alguien quedará complacido al saber cuánto lo he amado y que le hice el bien. Alguien se quedará callado, alguien, pero no sé quien.
- Autor: Pedro Pérez Vargas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de enero de 2023 a las 19:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: Henry Alejandro Morales
Comentarios2
Gracias
Triste 😔
La vida a veces es alegre y a veces es triste.
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